Divalterra fomenta la adhesión al Pacto de Alcaldes y ofrecerá asistencia a los municipios asociados
La Diputación de Valencia, a través de su empresa pública Divalterra, fomentará la adhesión de los municipios de la provincia al Pacto de Alcaldes y ofrecerá asistencia y ayuda técnica para avanzar en la lucha contra el cambio climático.
La proporción de los municipios de la provincia adheridos a este plan ha evolucionado notablemente. El porcentaje es mucho mayor al registrado en 2015, cuando en el mes de enero estaban asociados un total de 17 municipios.
Divalterra, en coordinación con el área de Medio Ambiente de la Diputación, ayudará a los municipios a poner en marcha acciones para la mitigación y adaptación al cambio climático. Se trata de herramientas y mecanismos de diagnóstico, prescripción, acción y control de desarrollo local.
En este sentido, la gerencia de Divalterra, Agustina Brines y Víctor Sahuquillo, ha comentado que bajo las directrices del área de Medio Ambiente de la Diputación, "Divalterra trabajará en el desarrollo del Pacto de las Alcaldías por el Clima y la Energía, fijando la atención en las entidades locales que, por su propia estructura y naturaleza, tienen difícil la ejecución de acciones coordinadas y efectivas para luchar contra ese gran monstruo que es el cambio climático".
Asimismo, Brines ha afirmado que la lucha contra la variación global del clima "es el mayor desafío en materia medioambiental de la historia moderna de nuestro planeta. Por ello, los gestores públicos debemos estar al frente, desde los ayuntamientos más pequeños hasta la más grande y poderosa de las instituciones".
Además, el 1% del importe de los Planes Provinciales de Obras y Servicios (PPOS) de la Diputación de Valencia se reparte entre los municipios suscritos al Pacto de Alcaldes con el fin de fomentar la adhesión de los ayuntamientos.
El Pacto de Alcaldías por el Clima y la Energía es el principal movimiento europeo en el que participan las autoridades locales y regionales asumiendo el compromiso de reducir las emisiones de CO2 en un 40% antes de 2030, además de mejorar su eficiencia energética, utilizar fuentes de energía renovable en sus territorios y desarrollar medidas para adaptarse a las consecuencias del cambio climático.
Este compromiso ha evolucionado notablemente desde 2015, año en el que la Comisión Europea lanzó el nuevo acuerdo para el clima y la energía y se definieron sus tres pilares que complementan el del 2008: la atenuación, la adaptación y un cambio de modelo energético basado en una energía segura, sostenible y asequible.
Pacto de las Alcaldías por el Clima y la Energía
Los municipios adheridos al Pacto de las Alcaldías por el Clima y la Energía obtendrán un mayor ahorro energético y, por consiguiente, un mayor ahorro económico. Para ello, se pretenderá reducir el consumo energético, optimizar los recursos y aumentar la eficiencia. Otro de los beneficios de esta acción sostenible será que permitirá conocer los sectores con mayor impacto sobre el calentamiento global.
Para desarrollar este compromiso sostenible se realizará, en primer lugar, un diagnóstico de la situación, que consistirá en un inventario de emisiones, del que se desprenderán mejores ámbitos de actuación y oportunidades para crear un programa de acciones estratégicas.
El Plan de Acción para la estrategia Sostenible incluirá la estrategia a seguir y objetivos claros hasta 2030, además de los compromisos firmes de los municipios en planificación urbana, transporte y movilidad y contratación pública. Igualmente, el plan recogerá medidas detalladas para los 3-5 años posteriores que incluyan las acciones definidas en la estrategia con el calendario de ejecución, la estimación de costes, la estimación de ahorro energético/aumento de la producción de energía renovable y la estimación de la reducción de CO2 asociada al mismo.
