Bajan la tasa de recogida de basura, el Impuesto sobre Bienes Inmuebles y el Impuesto sobre Actividades Económicas
El pleno del Ayuntamiento de Vilamarxant ha aprobado, esta mañana en sesión extraordinaria, una bajada de la tasa del servicio de recogida de la basura, del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y del Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE). Las tres propuestas han salido adelante por unanimidad de todas las formaciones políticas con representación municipal.
Estas bajadas entrarán en vigor el 1 de enero de 2018 y han sido impulsadas por el equipo de Gobierno con el objetivo de rebajar la presión fiscal sobre vecinos y vecinas del municipio y sobre las empresas e industrias que están asentadas en Vilamarxant.
En cuanto al servicio de recogida de basura, la tasa anual se reducirá alrededor del 14% de media. Además, a la hora de su aplicación, se diferenciará entre locales y plantas bajas, y el resto de viviendas en casco urbano. En el primer caso, la tasa anual se reduce en 24 euros, en cuanto al resto de alojamientos pasa de 50 a 43 euros. Según explicaba el alcalde de Vilamarxant, Jesús Montesinos, "con este cambio de la ordenanza lo que buscamos es que los vecinos y vecinas paguen el coste real y actual del servicio, y que no tengan que abonar ni un euro de más".
Bajada del IBI
La reducción del IBI se aplicará al tipo de gravamen de los bienes inmuebles urbanos, pasando del 0,77% actual al 0,70%, e igualándose al que se aplica a los inmuebles de naturaleza rústica. El tributo ya experimentó una reducción el año pasado, cuando pasó del 0,825 al 0,77%.
Con estas nuevas cifras, una vivienda de unos 90 metros cuadrados tendrá que pagar unos 293 euros, mientras que sin esta reducción la cantidad ascendería a 323 euros, lo que supone 30 euros menos. Para una casa de unos 214 metros cuadrados, la reducción será de unos 69 euros, pasando de los 755 euros con al gravamen actual, a los 686 con la reducción.
Esta medida ha podido tomarse, según Jesús Montesinos, "porque la situación de las arcas municipales lo permite y así se rebaja la presión fiscal, puesto que este impuesto recae sobre la mayoría de ciudadanos y ciudadanas". Por su parte, el segundo teniente de alcalde, Eliseo Sanz, apuntaba que "hemos trabajado para poder aplicar estas reducciones fiscales y hemos conseguido bajar este impuesto por segundo año consecutivo, tal y como marcaba la línea impositiva de este equipo de Gobierno, después de subidas del 25 por ciento durante la pasada legislatura".
Tanto el portavoz de Vilamarxant Junts Podrem, Salvador Bonet, como el del Grupo Municipal Popular, Ciro Ferrer, han planteado la posibilidad que en las zonas consideradas urbanas pero que realmente no están urbanizadas, como el área de diseminados de la Rodana, se mejoren los servicios que se ofrecen. Al respeto, el primer edil detallaba que, en ese caso concreto, se trata de una zona pendiente de urbanizar desde 1989. "En 28 años no se ha resuelto esta situación que, seguramente, tendrá que regularse a través de un Plan General de Ordenación Urbana, sobre el cual el equipo de Gobierno tiene el propósito de empezar a trabajar".
Bajada del IAE
Las propuestas aprobadas hoy también beneficiarán al sector empresarial, con la reducción del IAE, que recae sobre las empresas que facturan más de un millón de euros. Así, el coeficiente aplicable pasará de 3 a 2 para locales situados en el casco urbano y en las carreteras CV370 y CV50; y del 2,5 al 1,5 por los que están en la zona del polígono industrial y resto de diseminados. De esta forma, la tasa se acerca a la que se paga en los municipios de los alrededores.
Eliseo Sanz, concejal de Promoción Económica, explicaba que "con esta medida damos respuesta a las peticiones que nos habían llegado desde el sector empresarial, especialmente de las empresas con sede en el polígono de Arxilagar del Rullo. Nuestro propósito es que se generen más puestos de trabajo en el municipio y favorecer la llegada de empresas a Vilamarxant".
En general, según explicaba el alcalde "los buenos datos económicos y el superávit nos han permitido estas rebajas fiscales". Además, ha asegurado que "estas reducciones no impedirán que se continúen llevando adelante las inversiones y proyectos necesarios y previstos para Vilamarxant".
Aprobadas las cuentas de 2016
Otro punto importante del orden del día ha sido la aprobación definitiva de las cuentas generales del ejercicio 2016. Destaca el remanente de tesorería de estas cuentas que se cifra en 3 millones 794 mil euros, con un incremento en 1 millón 700 mil euros en comparación con el ejercicio anterior y de 2 millones y medio respecto a 2012, el primer año en positivo después de algunos ejercicios con este índice en negativo. Esto supone que el consistorio presenta unas cifras de liquidez y solvencia óptimas. Las cuentas han salido adelante con los votos a favor del equipo de Gobierno, la abstención de Vilamarxant Junts Podrem y el voto en contra del Partido Popular.
Por otro lado, en el pleno también se ha aprobado una modificación de créditos con un suplemento de 15.134 euros para el acondicionamiento y reasfaltado de los caminos rurales Massaseit y Canyada Sanchis.
Moción de Vilamarxant Junts Podrem
Como último punto, se ha tratado una moción de Vilamarxant Junts Podrem sobre el modelo turístico. La formación ha propuesto regular el arrendamiento de apartamentos particulares de uso turístico y la creación de un impuesto sobre la actividad turística, con un tramo municipal para contribuir a pagar todas aquellas inversiones y gastos de los ayuntamientos que redunden en una mejora de los servicios que ofrecen a los visitantes.
Finalmente, el punto no ha salido adelante, puesto que ha contado con la abstención de los concejales de Compromís y el voto en contra de PP, PSOE y los concejales no adscritos.
Todas las formaciones han destacado, como aspectos positivos de la moción, el trabajo para evitar irregularidades en el alquiler de apartamentos y la necesidad de luchar contra la precariedad laboral del sector, pero no ha habido unanimidad respecto a la implantación de una tasa turística, una resolución que, ahora mismo, está tratándose a las Cortes.
Durante el inicio del pleno, los portavoces del Grupo Municipal Popular y de Vilamarxant Junts Podrem han planteado la posibilidad que este tipo de sesiones extraordinarias y con puntos de urgencia se celebren por la tarde para que puedan asistir más vecinos y vecinas. Jesús Montesinos ha comentado que se tendrá en cuenta la petición pero que, en este caso, han sido los mismos técnicos municipales los que han solicitado que la sesión tuviera lugar por la mañana, para finalizar los trámites de publicación de las modificaciones aprobadas en el pleno, y así, poder cumplir los plazos de publicación para su entrada en vigor el 1 de enero de 2018.