Reabren el Refugio Antiaéreo de la Plaza Balmis

Alicante está repleta de refugios antiaéreos (tiene cerca de 92 documentados), aunque es un hecho desconocido por gran parte de la ciudadanía alicantina y española. La capital fue una de las últimas ciudades en caer durante la Guerra Civil y tiene mucha historia de la represión franquista que, tras largos años, sigue sin ser contada a la mayoría de la sociedad.

Esta mañana se ha dado un primer paso para cambiar esa situación. La Concejalía de Memoria Histórica y Democrática, dirigida por la edil María José Espuch, ha reabierto el Refugio Antiaéreo de la Plaza Balmis, tras la reforma del sistema de acceso que provocó su cierre a mediados de 2015 por falta de seguridad.

La obra ha sido acometida por el área de Urbanismo y ha consistido en la retirada de la puerta hidráulica manual horizontal que se instaló durante el mandato anterior. Además, se ha reformado el acceso y se ha instalado una puerta metálica vertical que permite la visita al refugio con plenas garantías de seguridad para los usuarios, según han informado fuentes municipales.

El Refugio de la Plaza Balmis, construido en 1937, cuenta con un área de unos 200 metros cuadrados divididos en seis cámaras o celdas, y una capacidad para alrededor de 600 personas. Originalmente disponía de dos accesos con entrada en forma de codo, para evitar la proyección de metralla al interior y amortiguar las ondas expansivas de las explosiones, si bien en la actualidad ha quedado habilitada únicamente una.

También se han sustituido los sistemas de ventilación y de iluminación, así como del pavimento de alrededor. Todas estas mejoras y la organización de visitas guiadas permitirán al público conocer la historia de nuestra ciudad.

Espuch ha recordado que Alicante fue, pese a estar en la retaguardia durante la Guerra Civil, una de las ciudades más bombardeadas. Por ello, se han organizado visitas guiadas diarias que expliquen a los visitantes la historia detrás de los refugios, incluido el otro que hay abierto al público, situado en la Plaza Séneca.

Su reapertura forma parte del proyecto “Alicante, ciudad de la memoria”, cuyo objetivo es poner en valor el patrimonio material de Alicante, entre los que se incluyen los refugios y los complejos defensivos como el Cap de l'Horta y el propio Centro de Interpretación (CIP), y la memoria documental, los archivos sobre la represión y del Cementerio de Alicante.

El horario de visitas guiadas a Séneca y Balmis incluye grupos a las 10 horas los lunes, miércoles y viernes, los sábados a las 12 y a las 17 horas y los domingos a las 12 horas.

Espuch ya ha manifestado en diversas ocasiones la necesidad y la importancia de poner en valor todo el patrimonio histórico de Alicante, también como punto estratégico para reforzar el turismo en la ciudad.