Vila-real supera su propio récord con un bocadillo infinito

Vila-real ha recuperado su ya tradicional bocadillo gigante con una merienda popular este martes por la tarde.

Un evento en el que la ciudad ha superado su propio récord, superando los 325 metros de infinito pan.

Después de nueve años desde la última edición, esta cita gastronómica, impulsada por la Asociación Gastronómica con la colaboración de la Concejalía de Comercio y Hostelería, y en la que también participa la Asociación de Hostelería y Ocio (Ashiovi), ha regresado con fuerzas renovadas, consiguiendo superar el récord de 2014, cuando casi se alcanzaron los 300 metros de bocadillo.

Puedes consultar en elperiodic.com las mejores fotografías de la jornada que ha tenido lugar en la plaza del Pastoret del Termet de Vila-real, que se convertirá en una gran cocina al aire libre en la que los propios asistentes han preparado los diferentes tramos del bocadillo de grandes dimensiones con los ingredientes que previamente se habrán dispuesto para cada una de las partes.

Esta fiesta surgió de la mano de los añorados Pasqual Batalla, teniente de alcalde del Ayuntamiento, y el restaurador Pepe Cabanes 'El Dimoni', dos personas que se implicaron en la recuperación y difusión de la gastronomía local así como en el impulso a este tipo de iniciativas para dinamizar el sector.

Para conseguir este récord han sido necesarias más de 500 barras de pan del horno tradicional de Garrofa, cerca de un millar de lonchas de queso, más de 600 porciones de salchichón, otras tantas de chorizo, mortadela, jamón york, media docena de latas grandes de atún, más de cinco kilos de crema de cacao, tres kilos de cacao en polvo, tres kilos de leche condensada y cuatro kilos de plátanos.

Además, cerca de un centenar de metros del bocadillo han sido reservados para un bocadillo que se preparará expresamente para donar a Cáritas. Además, también se ha reservado una parte del bocadillo especial para celíacos.