Valencia le pasa el testigo a la ciudad portuguesa Guimarães como Capital Verde Europea de 2026
La catastrófica dana que sufrió Valencia el pasado 29 de octubre, ha sido el eje principal sobre el que se ha basado el discurso de este encuentro
Valencia le pasa el testigo a su país vecino, a Portugal, en concreto será la ciudad de Guimarães la que ostentará el reconocimiento como Capital Verde Europa 2026. Aunque el legado lo prolongará el año que viene la capital de Lituania, Vilna, hoy se ha conocido quién continuará este importante compromiso con el medioambiente en 2026.
En el mismo acto celebrado este miércoles en la capital del Turia, se ha conocido a los galardonados como Green Leaf 2026, que serán las poblaciones de Águeda (Portugal) y Vaasa (Finlàndia). Respecto a este galardón, está destinado a las localidades entre 20.000 y 100.000 habitantes, que no son lo suficientemente grandes para competir por el título de Capital Verde Europea, pero que desarrollan igualmente políticas de sostenibilidad.
Durante el acto de entrega de premios, presidido por la alcaldesa, María José Catalá, todos los participantes han querido dedicar unas palabras a los afectados por la dana y han recordado “el camino largo que les queda por hacer a las ciudades europeas frente al cambio climático”.
En este sentido, la catastrófica dana que sufrió Valencia el pasado 29 de octubre, ha sido el eje principal sobre el que se ha basado el discurso de este encuentro. Es por eso que Catalá ha asegurado que “la crisis climática es un hecho, así como los fenómenos extremos no son una amenaza lejana, sino una realidad que estamos sufriendo y que afecta a nuestra vida cotidiana, común a muchos puntos del planeta, pero cuyo impacto en la cuenca mediterránea es especialmente grave y urgente”.
Asimismo, la alcaldesa ha señalado que ahora se inicia la tarea más importante, “la reconstrucción”, y ha destacado los tres ejes que la ciudad debe conjugar para ello: “sostenibilidad, seguridad y crecimiento”. Tal y como ha explicado, estos tres pilares se concretan en tres acciones: abordar las infraestructuras hidráulicas y de prevención necesarias ante estos episodios; la recuperación y reactivación de la economía, generando los mecanismos y fortalezas suficientes de cara a posibles afectaciones futuras; y la protección del patrimonio natural, con especial atención a l’Albufera.
La primera edila también ha reivindicado la necesidad del apoyo europeo para superar esta catástrofe y adaptarse a las consecuencias del cambio climático, puesto que “no podemos hacerlo solos”, ha afirmado. “Es indispensable que la Comisión Europea active el Fondo de Solidaridad y que agilice la concesión de las ayudas” y “como única Capital Verde de la cuenca mediterránea, tenemos la obligación de ser guía en las adaptaciones que vamos a necesitar las ciudades mediterráneas, para garantizar a la vez seguridad, desarrollo y sostenibilidad”, ha destacado Catalá.
Por otra parte, la concejala de Innovación, Paula Llobet, ha señalado que “el futuro depende de las decisiones que tomemos”, y ha mostrado su “esperanza en un mundo que en el que enfrentamos retos medioambientales”. “En Valencia, después de la dana que hemos sufrido, hemos visto como las catástrofes ponen a prueba, pero también hemos visto que las ciudades pueden levantarse con la solidaridad, y también hemos iniciado proyectos que dejarán un legado a las futuras generaciones”, ha asegurado.
Por su parte, el director general adjunto de Medio Ambiente de la Comisión Europea, Patrick Child, ha recordado la fatídica dana que arrasó con l’Horta Sur el pasado 29 de octubre y ha lamentado que “lo que resulta alarmante, según datos científicos, es que cada vez nos enfrentaremos a más casos meteorológicos extremos”, es por eso que “nos tenemos que preparar para el cambio climático y actuar”, y colocar como aspecto prioritario en la agenda los planes de gestión de inundaciones”, para asegurar “ nuestro compromiso con un futuro sostenible”.
Guimarães (Portugal), Green Capital 2026
Guimarães (Portugal) es una urbe histórica, conocida como la “cuna de Portugal” por su papel protagonista en los primeros años de la historia del país. Situada geográficamente al norte, es famosa por su arquitectura medieval bien conservada (con ejemplos como el Castillo de Guimarães o el Palacio de los Duques de Braganza). De hecho, su casco antiguo cuenta con la declaración de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y cuenta con una vibrante escena cultural, con festivales, museos y espacios de arte contemporáneo. Su designación como Capital Verde Europea 2026 responde a sus prácticas de gestión de residuos y economía circular (que incluyen la prohibición de materiales de un solo uso en los eventos de la ciudad, y la promoción de programas para prevenir el desperdicio de alimentos). Además, ha mejorado la eficiencia del agua mediante la reducción del consumo en edificios municipales, la detección temprana de fugas y reparaciones, y la creación de estaciones públicas de agua.
Águeda (Portugal) y Vaasa (Finlandia), Green Leaf 2026
Águeda (Portugal), es especialmente conocida por su festival anual AgitÁgueda, que presenta instalaciones de arte público, actuaciones callejeras y el famoso Umbrella Sky Project, que decora las calles con paraguas de colores suspendidos en el aire. Aparte de por su centro histórico, la ciudad destaca por sus entornos naturales, como la Pateira de Fermentelos, el lago natural más grande de la península ibérica. Su designación como Green Leaf 2026 responde a su “Plan de Acción Climática”, cuyo objetivo es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 90 % en 2050, en comparación con 2005. Además, destaca también su proyecto BeÁgueda, que introduce un sistema de bicicletas eléctricas compartidas para mejorar la eficiencia del transporte, reducir las emisiones de CO2 y fomentar estilos de vida saludables.
Vaasa (Finlandia), en la costa oeste, ofrece arquitectura histórica y moderna, con monumentos destacados como el Tribunal de Apelación, el Ayuntamiento y la plaza del Mercado, y también es reconocida por sus instituciones educativas, como la Universidad de Vaasa. La urbe cuenta con patrimonio natural, como el archipiélago de Kvarken, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, que ofrece paisajes y actividades al aire libre y, además, su ubicación costera la convierte en un centro para actividades marítimas. Su designación como Green Leaf 2026 responde a la implementación de sistemas innovadores, como la aplicación web Water Account, para monitorear en tiempo real el consumo de agua de los usuarios. Además, cuenta con el primer centro comercial de reciclaje en Finlandia, Minimossen, enfocado en el consumo sostenible.