Valencia medirá la huella hídrica del turismo para gestionar mejor el agua de la ciudad

¿Se imaginan poder medir el impacto de cada turista que visita Valencia sobre las reservas de agua dulce? ¿Sería posible saber cuál es la huella hídrica de la actividad turística? La ciudad de Valencia se va a convertir en una de las primeras ciudades a nivel mundial en auditar este impacto que genera turismo, tanto directo como indirecto.

El año pasado la ciudad de Valencia ya hizo lo mismo con la huella de carbono, convirtiendo a la ciudad en un referente mundial de turismo sostenible. Este martes se ha presentado un innovador sistema para calcular y certificar la huella hídrica que genera el turismo, al igual que se hizo hace un año con el de carbono.

“La medición se realiza mediante un innovador sistema digital, que es capaz de medir el gasto de agua total y de cada uno de los componentes, una información imprescindible para definir e implementar acciones de reducción y compensación”, ha explicado Juan Luis Pozo, Director de sostenibilidad de Global Omnium, empresa que ha desarrollado el proyecto. Esta medición ha obtenido la certificación de Aenor, lo que le ofrece una gran consideración tanto a nivel nacional como internacional.

La huella hídrica anual del turismo en València es de 74,23 hm3. Este informe permite conocer que el consumo directo de agua por los turistas supone el 16% del total, el otro 84% es un consumo indirecto, asociado a la producción de bienes y servicios. Los servicios públicos de agua representan un 0,53% de la huella hídrica “lo que demuestra la gran eficiencia hídrica de la ciudad, la mayor de Europa con un 87 % de eficiencia real gracias, entre otras cosas, a esta exhaustiva medición”, ha indicado García.

Con este nuevo sistema, ha explicado Juan Luis Pozo, se va poder mejorar la economía local y circular gracias a la etiqueta inteligente: “Los productos locales tienen una logística con una huella inferior a los productos que vienen de más lejos como China. No se trata de competencia desleal pero el ciudadano va a poder comprobar que los productos llevan su fiscalidad en la huella de carbono”.

Esta acción se enmarca en las acciones que está llevando a cabo el Ayuntamiento de València para combatir el impacto del cambio climático y convertirse en un destino turístico sostenible. Para ello, uno de los objetivos es ser capaz de regenerar la misma cantidad de carbono y de agua que consume. Esta mediación es la primera de una serie de medidas que va llevar a cabo la ciudad para gestionar de manera eficiente un recurso esencial, el agua.

Tal y como ha explicado el concejal de Turismo, Emiliano García, “la publicación de este informe y la verificación de la huella hídrica convierten a València en referente mundial a la hora de acometer este necesario camino de transformación de nuestra relación con el entorno, también desde la perspectiva turística” además este informe  “reafirma el compromiso del consistorio en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y Agenda 2030 de la ONU”.