Ribó: "Nunca en la historia del Ayuntamiento se habían ejecutado tantas inversiones en la ciudad"

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha anunciado hoy que el Ayuntamiento va a reclamar ante el Ministerio de Hacienda su salida del Plan de Ajuste, que fue aprobado en 2012 con una vigencia de 10 años, pero que ha dejado de ser preceptivo, dado que el consistorio cumple completamente y de manera sostenida con las exigencias de pago de deuda y de pago a proveedores por las que se estableció dicho plan.

Así lo ha subrayado hoy el alcalde Joan Ribó, acompañado por el concejal delegado de Hacienda, Ramón Vilar. Ambos han destacado la solvencia de las finanzas municipales, que han apoyado en datos y en el aval de dichos datos por parte del interventor municipal. De hecho, la Intervención Municipal ha remitido un informe al Ministerio de Hacienda sobre la ejecución del presupuesto municipal de 2016 a fecha de 31 de enero de 2016, que refleja los buenos datos del pasado ejercicio, y que sustenta la reclamación de poner fin a las determinaciones del Plan de Ajuste.

Así, el grado de ejecución global de los presupuestos del 2016 ha sido del 90%. El alcalde ha destacado cómo la voluntad de "presupuestar bien, sin trampas, y con planteamientos ajustados a la realidad" llevó, por ejemplo, a fijar unas previsiones de ingresos "realistas y tendentes a la baja", que se han traducido en que los ingresos finales fueron alrededor de un 5 % más que los previstos inicialmente. "No quisimos presupuestar de manera especulativa", ha explicado Joan Ribó, "sino con objetivos verificados."

En cuanto a la ejecución de inversiones, en principio el proyecto presupuestario preveía 75 millones de euros para este concepto. Finalmente, tras la aprobación de distintas modificaciones crediticias, el montante total ejecutado ha ascendido a 89 millones de euros (sumando presupuesto inicial y modificaciones, la cifra de previsiones alcanzaba los 134 millones).

LA INVERSIÓN MÁS ELEVADA DE LA HISTORIA

"Nunca en la historia de esta casa se habían gestionado tantas inversiones", ha asegurado el alcalde, quien ha repasado las cifras de los últimos años: desde los 34,8 millones del año 2013, los 52,3 millones en 2014, los 62,1 en 2015, hasta llegar a los 89 millones de 2016.

Por eso, Ribó ha instado a los grupos de la oposición municipal a que, "cuando nos tachan de que ejecutamos poca inversión, que adecúen sus críticas a la realidad". "Estamos ante la cantidad de inversión más elevada que ha hecho jamás el Ayuntamiento", ha reiterado el primer edil.

Otro de los elementos "significativos" que ha destacado Joan Ribó ha sido la partida 413, que hace referencia a las facturas con dificultad de pago entre ejercicios. Pese a que las previsiones más optimistas preveían superar los 6 millones de euros, finalmente han estado por debajo. En concreto, 5'6, de los que 3 millones son referidos a facturas, y el resto, a expropiaciones. Es necesario recordar que la partida 413 presentaba en el año 2013 un total de 42 millones de euros; 24 en 2014 y 20 millones en 2015. Ribó ha mostrado su "satisfacción por la evolución de la 413, que es una señal inequívoca de que este Ayuntamiento y este Gobierno gestionan de manera seria y rigurosa".

SALIDA DEL PLAN DE AJUSTE

Finalmente, el alcalde ha subrayado los buenos datos también en el parámetro del periodo medio de pago a proveedores, que en diciembre se redujo hasta los 2,7 días. "Buscad alguna otra gran ciudad de España que tenga estas cifras", ha pedido Ribó a los medios de comunicación. De hecho, el alcalde de Valencia ha puesto de relieve el hecho de que nuestra ciudad ha sido la única entre las grandes urbes del Estado que tuvo su presupuesto de 2017 aprobado antes de Navidad, "lo que es un indicador de la estabilidad del Gobierno local y de nuestras políticas", ha afirmado.

Una vez se disponga de los datos definitivos del presupuesto de 2016, se planteará de nuevo la exigencia de que Valencia salga del Plan de Ajuste, "que si bien en su momento fue imprescindible para que el anterior Gobierno del PP pagara sus deudas", ha señalado Ribó, "ahora ya no lo es".

Ribó ha exigido la salida del Plan de Ajuste "porque ya no nos toca estar ahí, y porque además permanecer implica una serie de restricciones en la gestión que no tienen razón de ser". Por ejemplo, impide la creación de fundaciones –como la que se pretende para crear el Museo de la Mar- o formar parte de entidades metropolitanas –como la del Transporte, necesaria para acceder a financiación estatal- o incluso definir a qué objetivos dedicar el superávit en las cuentas. "Este gobierno es serio, cumple sus objetivos, y por eso, ahora ya no hay motivo para seguir con el corsé que es el Plan de Ajuste", ha concluido el alcalde, que ha recordado que en el mes de diciembre, el periodo medio de pago a proveedores se ha situado en la cifra récord de 2,7 días.

En parecidos términos se ha manifestado el delegado de Hacienda, Ramón Vilar, quien lo ha calificado de "agresión a la autonomía y a la financiación municipal", y de "tutela totalmente injusta que no es necesaria".

Vilar ha recordado que la reducción del periodo medio de pago a proveedores se ha consolidado como una tendencia sostenida y contínua. Y asimismo, la deuda bancaria, que ha pasado de 1.200 millones en 2012 a 668 en 2016 (y las previsiones para finales de 2017 son de 585 millones, prácticamente una reducción del 50%).

La corporación ya solicitó la salida del Plan meses atrás, pero la respuesta del Ministerio no fue positiva, dado que en aquel entonces el ejecutivo era "provisional". Por eso, ahora se vuelve a formular la misma petición.

OTROS TEMAS DE ACTUALIDAD

A preguntas de los periodistas, el alcalde ha dado respuesta a otros asuntos de la actualidad. Respecto a la posibilidad de que la Universidad Europea se instale en el Cabanyal, Ribó ha reiterado que "puede significar un cambio de tendencia muy positivo para el barrio, siempre desde el respeto a las normas urbanísticas y a la trama del barrio, como es obvio". La fórmula para la utilización del espacio no sería la permuta de solares en ningún caso, ha añadido, y se estudiará el método, que podría ser una cesión temporal, siempre garantizando el uso universitario.

En cuanto a la elección del Ágora de la Ciutat de les Arts i les Ciències como sede de CaixaFòrum, el alcalde ha mostrado su satisfacción por la presencia en nuestra ciudad de "un elemento tan importante en el ámbito cultural como éste, que será también un importante eje de atracción turística".