Polémica en las Fallas por la imagen de la Virgen de los Desamparados en versión 'drag queen'
El cartel de una discoteca ha levantado multitud de críticas en el mundo fallero, que califica de “falta de respeto” la forma escogida para reivindicar la igualdad
La Virgen de los Desamparados, patrona de Valencia, transformada en Drag. Es la polémica imagen que forma parte del cartel de una discoteca de Valencia y que está levantando ampollas en el mundo fallero y entre los devotos de la Virgen.
El objetivo del cartel, protagonizado por la drag valenciana Liz Dust y fotografiado por el creativo y artista valenciano Eduardo Jairycovich, era el de promocionar las Fallas de Valencia como una fiesta que acoge y que se abre al mundo.
Bajo el lema ‘Somos cultura, somos tradición, somos diversidad', la imagen está cosechando numerosas críticas entre el colectivo fallero que se pregunta si era necesario mostrar la igualdad y apertura de las Fallas con una imagen así de la patrona de los valencianos.
Lluvia de críticas entre los falleros
“¿Qué tiene que ver reivindicarse con faltar al respeto?, me parece vergonzoso”, comenta un usuario en redes sociales. Otros califican el acto como una “falta de educación” y critican que se utilice así la imagen de la Virgen.
También desde el propio colectivo se dejan ver algunas críticas: “Por muy LGTB+ que alguien sea y yo me incluyo, ¿Hace falta levantar ampollas para revindicar algo y pedir respeto? Si no vamos por el mundo con dignidad y demostrando educación y respeto nosotr@s.... ¿Cómo nos lo van a dar el resto de la sociedad y más la gente retrógrada?”, reflexiona otra usuaria.
Las figuras que forman parte de la escena
Tal y como les contó elperiodic.com, la protagonista central de la fotografía es Liz Dust, una travesti que trabaja dando espectáculo y haciendo activismo a través del arte y la actuación. Su figura imponente simula a la “Geperudeta” en la Ofrenda.
"Desde el respeto y la tradición que conlleva la figura de la virgen, se ha querido representar cómo el travestismo ha sido testigo, a lo largo de la historia, de santas, monjas y hasta algún papa transformista", explican los promotores en un comunicado.
En sus brazos encontramos la figura del niño Jesús, representada por el propio autor de la obra: "Inspirándose en el arte gótico, da imagen al niño Jesús con morfología de adulto, algo muy usual en las pinturas y esculturas de esta época".
En el comunicado explican también que la figura de la fallera con el pecho al descubierto viene apoyada por la corriente actual, “de restringir la libertad de movimiento de las mujeres y sus pezones”, que acaba donde comienza el cuerpo femenino como espectáculo: "Ya nos lo decía Rigoberta Bandini en su canción “Ay mamá” con “Paremos la ciudad, sacando un pecho fuera al puro estilo Delacroix"”.
Otra de las figuras que llaman la atención, es la del chico queer vestido de fallera y explican que es una crítica porque el reglamento fallero no permite que los hombres vistan prendas femeninas en actos oficiales y viceversa.
Desde el Arzobispado de Valencia no han querido manifestarse respecto a esta polémica y han declinado hacer declaraciones a elperiodic.com.