12 personas en situación de exclusión finalizan el curso de mantenimiento y rehabilitación de viviendas
La concejala de Inserción Sociolaboral, Isabel Lozano, ha asistido esta mañana a la clausura del curso de Mantenedor/a y Rehabilitador/a de Viviendas» de este año, en el que han participado 12 personas en situación de exclusión. El alumnado ha cobrado una beca mensual por la realización del curso y ocho de los estudiantes serán contratados para hacer trabajos de rehabilitación y acondicionamiento de viviendas de usuarios de los servicios sociales municipales. En los últimos tres años, un total de 36 personas se han beneficiado de esta acción formativa.
«Se trata de uno de los programas de inserción más potentes del Ayuntamiento por su triple vertiente: formativa, laboral y de dignificar las condiciones de las viviendas de las personas con menos recursos», ha explicado la edila, quien ha animado a «todas las personas que tengan necesidades de reformas urgentes para que se pongan en contacto con su centro municipal de servicios sociales para poder solicitarlo».
El programa, llevado a cabo en colaboración con la Fundación Apip-Acam, incluye una formación de 368 horas y posterior contratación por seis meses para realizar pequeñas reparaciones en viviendas de familias con escasos recursos económicos atendidas por los servicios sociales municipales, especialmente hogares de personas mayores.
Se contratará este año a ocho alumnos, dos de ellos mujeres. A lo largo de las tres ediciones, se ha contratado a un total de 24 personas. «De esta manera, conseguimos, por un lado, formar y dar posibilidades de empleo a personas en situaciones delicadas. Y se consigue también que otras personas con escasos recursos, sobre todo gente mayor, obtengan servicios gratuitos de reparación de todo tipo», ha señalado Lozano.
La mayoría de los beneficiarios de las rehabilitaciones es gente de más de 61 años: el 48% en el período 2015-2016 y el 56% en 2016-2017. «Uno de los objetivos del proyecto es conseguir la permanencia de la gente mayor a casa. Es muy importante facilitar los servicios y las adaptaciones necesarias que les permitan continuar residiendo a su hogar, si es que así lo desean y pueden hacerlo», ha indicado la concejala.
«Estas pequeñas reparaciones facilitan la movilidad y permanencia en el hogar de la gente mayor, favorecen el ahorro social al retrasar los ingresos en residencias asistidas, reducen las peticiones de recursos asistenciales, mitigan la degradación de las viviendas y evitan posibles accidentes», ha añadido Isabel Lozano. En cuanto a la tipología de las intervenciones, se centran en obras como la sustitución de la bañera por plato de ducha, la mejora y sustitución de mobiliario de cocinas, puertas y ventanas o mejoras en sistemas de electricidad, fontanería y pintura.
Según la edila, «con este plan los alumnos consiguen acercarse al mercado laboral, como instrumento de inclusión social, puesto que la mayor parte de ellos nunca había tenido una contratación laboral reglada. Los alumnos de las dos anteriores ediciones hicieron una valoración muy positiva del proceso de formación, puesto que adquirieron conocimientos que no tenían y les permitió adquirir hábitos para su inclusión social y laboral. Todos los alumnos contemplan poder dedicarse a esta profesión después de su paso por el programa».