El Gobierno vuelve a negar la cesión de Sant Doménec a la ciudad de València por “ser necesario para organizar operaciones militares”
El Gobierno de coalición ha vuelvo a negarse a la desmilitarización y cesión del Convent de Sant Deménec, el edificio gótico religioso más importante de la ciudad de València, usado para fines militares. De esta manera, la petición hechas en las Cortes Valencianas con los votos de Compromís, PSPV-PSOE y Podemos, vuelve a denegarse por el Gobierno central de estos dos últimos partidos.
El portavoz de Compromís en el Senado, Carles Mulet, preguntó de nuevo por las previsiones para recuperar este edificio único en el territorio valenciano, y la respuesta vuelve a negar las opciones de ponerlo en valor “el Convento de Santo Domingo es una propiedad afecta al Ministerio de Defensa y asignada al Ejército de Tierra. En esta instalación, en la que trabajan a diario 238 efectivos entre civiles y militares, está ubicado el Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad así como otras unidades del Ejército de Tierra. Las unidades ubicadas en el Convento de Santo Domingo aseguran la necesaria disponibilidad y preparación para la organización de las operaciones militares requeridas por el Jefe del Estado Mayor de la Defensa. Se considera, por lo tanto, una propiedad fundamental y no está prevista su cesión. No obstante, se informa que, dado el valor cultural del edificio, se realiza el esfuerzo necesario para garantizar su conservación y su puesta a disposición para la ciudadanía, con la organización de jornadas de puertas abiertas y visitas guiadas; estas actividades tienen una excelente acogida, tal y como demuestra el elevado número de visitas realizadas.
Para Mulet “costaba poco adquirir un compromiso para estudiar su cesión, sin más pretensiones, pero el Gobierno del PSOE-UP ha preferido descartar directamente cualquier cambio, han dejado en evidencia a sus partidos en el País Valencià, que votaron a favor de esta cesión”.
Mulet ha recordado que las Cortes Valencianas han exigido que se desmilitarizara el convento y se garantizara el acceso al público como exige la ley la ser un “Monumento Histórico Artístico Nacional” y BIC, y que se cediera su titularidad a la Generalitat.
El antiguo Convento de Predicadores es uno de los monumentos con mayor interés histórico y artístico de la ciudad. El complejo, cuya primera piedra fue colocada por el rey Jaume I en 1239, fue sede de la Orden de Predicadores, y entre sus muros vivieron, entre otros, sant Vicent Ferrer y san Lluís Bertrán. Hoy ésta joya está cerrada para el público excepto pocos días concretos al mes, que no se anuncian.
Para Mulet “ todo el personal que trabaja en el mismo, puede perfectamente ubicarse en otro sitio, y no en una joya arquitectónica en el centro de la Ciudad, todas esas supuestas operaciones militares, no necesita de un convento gótico, que por otra parte, es puesta en peligro por el riesgo respecto a atentados o agresiones bélicas a objetivos militares, destinarlo al turismo completaría la oferta de la València medieval, donde no queda ningún edificio religioso gótico de esta envergadura e importancia. Destinarlo a usos militares es un error”.