5 colegios municipales desarrollarán el programa de ahorro energético 50/50
Un total de 5 centros escolares municipales desarrollarán el próximo curso el denominado Proyecto 50/50, una iniciativa de ahorro energético que busca involucrar a toda la comunidad educativa con el apoyo y acompañamiento del personal del Ayuntamiento.
El contenido y la dirección del proyecto se basan en el diagnóstico sobre consumos energéticos realizado por un equipo de trabajo integrado por personal funcionario del Ayuntamiento. Así lo han explicado esta mañana el concejal de Energías Renovables y Cambio Climático, Jordi Peris, y el concejal de Gobierno Interior, Sergi Campillo, quienes han expresado su satisfacción por esta experiencia piloto que se iniciará el próximo curso, 2017-2018.
El objetivo final del programa es mejorar el ahorro energético en las escuelas de la ciudad, y para ello se busca el compromiso de la comunidad educativa de cara a lograr un cambio de hábitos y de comportamiento en el uso de la energía, tanto del profesorado como del alumnado, que permita generar ahorros. Como contrapartida a este cambio de hábitos, el Ayuntamiento devolverá a cada una de las escuelas el ahorro generado: el 50 %, en beneficios económicos para invertir en las necesidades de la escuela, y el otro 50 %, que deberá ir destinado a reinvertir en acciones que representen más el ahorro energético.
El concejal de Gobierno Interior, Sergi Campillo, ha subrayado la "necesidad de caminar hacia un modelo social y energético basado en el ahorro de energía y en la apuesta por las energías renovables, y para ello es imprescindible la creación de una cultura energética que implique tanto a las personas como a las organizaciones", ha asegurado. "Y en este proceso de toma de conciencia –ha continuado el concejal– el papel de la comunidad educativa es fundamental, especialmente entre los niños y las niñas".
En parecidos términos se ha expresado por su parte el concejal de Energías Renovables y Cambio Climático, Jordi Peris, quien ha destacado que el proyecto busca implicar a toda la comunidad educativa en la reflexión sobre cómo consumimos como comunidad. "Actualmente, somos máquinas de malgastar energía, y por eso es necesario impulsar un proceso de reflexión sobre cómo se ha de consumir para que sea un consumo responsable y sostenible". De ahí la importancia de impulsar esta acción en el contexto educativo de las escuelas, puesto que suma al proceso de ahorro en sí una doble vertiente de sensibilización y concienciación, y de irradiación de las ideas de consumo responsable hacia las familias del alumnado.
Esta apuesta transformadora del gobierno local surge de la colaboración entre diferentes servicios municipales y se refiere a todos los conjuntos energéticos, desde la electricidad hasta el gasoil. El diagnóstico municipal en el que se basa la iniciativa presenta datos como que el consumo energético (electricidad, agua, gas y gasóleo) del Ayuntamiento de València fue de 21.929,780 euros en el año 2015 y, de ellos, algo más del 10 % (concretamente el 10,16%) corresponde al gasto que se realiza en los centros escolares, y asciende a 2,227.843 euros.
En el proyecto se involucra a toda la comunidad educativa y cuenta con el apoyo y acompañamiento del personal del Ayuntamiento.