El Ayuntamiento de València plantea la herramienta de la ‘compra pública de innovación’ para orientar al mercado a cerar innovación dirigida al bien común

«El sector público tiene que tener un papel clave en el desarrollo de innovación, ayudando al mercado a crear innovación orientada a generar beneficio público, guiado por el bien común y los intereses generales». El alcalde de València, Joan Ribó, ha defendido esta mañana la importancia del papel de las administraciones públicas en definir e impular los procesos de innovación por parte del sector que den respuesta a las necesidades de la sociedad.

Ribó ha participado en la jornada «Construyendo la València del futuro. Oportunidades de la compra pública de innovación para avanzar en el reto de València Ciudad Saludable», organizada por el Ayuntamiento de València y Las Naves. Tal como ha explicado el alcalde, «en València estamos haciendo una apuesta por la Compra Pública de Innovación como forma de dar respuesta a alguno de los retos de nuestra Estrategia Urbana València 2030, impulsar nuestras Missions de ciudad, y para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 y mejorar la vida de las personas».

Se trata una serie de siete talleres sobre Compra Pública Innovadora, que se ha inaugurado este martes con una sesión dedicada a ‘la ciudad saludable’. Cada taller dirigirá la definición de posibles retos a resolver a través de la compra pública de innovación en unas áreas temáticas específicas. Tal como ha explicado Joan Ribó, «en muchas ocasiones, las ciudades y sus gobiernos se enfrentan a necesidades y problemas públicos muy complejos que afectan a las personas, al medio ambiente, a las relaciones sociales y a la economía, y para los cuales no existe un producto o servicio adecuado en el mercado que nos ayude a resolverlo de manera adecuada». «La Compra Pública de Innovación –ha continuado- ha de ser una herramienta para orientar nuestras compras de manera que se ayude al mercado a desarrollar los productos y servicios innovadores que no existen».

EL MAPA DE LA DEMANDA TEMPRANA

Por eso esta serie de talleres van dirigidos a construir el ‘Mapa de Demanda Temprana de València’, es decir, para identificar el conjunto de retos o problemas que, hoy por hoy, no están resueltos, pero que serían susceptibles de serlo a través de procesos de innovación, los cuales pueden ser impulsados mediante mecanismos de Compra Pública de Innovación. «Y que nos permitirán construir conjuntamente soluciones nuevas para conseguir una ciudad más saludable, más sostenible, más compartida y más emprendedora», en palabras de Ribó.

EL DETONANTE: LA CRISIS DE LA COVID

Tal como ha explicado el alcalde, «la crisis de la covid-19 nos ha enseñado dos cosas muy importantes: tomar conciencia de nuestra vulnerabilidad ante acontecimientos disruptivos; y tener la oportunidad de repensar nuestras ciudades desde la perspectiva de la salud para incorporarla como criterio de referencia de todo el conjunto de políticas municipales»

Ribó ha defendido, en este sentido, que las ciudades «pueden ser saludables si se comprometen con la salud, entendida como mucho más que la ausencia de enfermedad, y facilita estilos de vida más sanos». Y ha asegurado que la València de 2030 aspira a cumplir con estos parámetros: «una València donde el código postal no determine la salud de las personas, ni tampoco lo haga el género, la etnia, la edad, la clase social o el estatus migratorio».

«Una València –ha continuado- donde todos los barrios sean entornos saludables con aire limpio todos los días del año,  libres de contaminación, residuos y ruido perjudicial. Barrios pensados para una vida saludable en todas las etapas de la vida, especialmente la gente mayor y los niños y niñas. Barrios facilitadores de estilos de vida activos y saludables, como andar y hacer deporte, en contacto con la natura y en conexión con l'Horta, el río o el mar. Barrios donde la alimentación saludable y de proximidad sea un valor y esté al alcance de todo el mundo Con un urbanismo integrador y viviendas accesibles y de calidad. Barrios cohesionados para vivir y convivir, con sólidas redes ciudadanas que fomentan la salud física, mental, emocional y relacional de las personas».

El alcalde ha concluido su intervención destacando que, al tratarse de un instrumento nuevo, la compra pública de innovación «requerirá de un importante trabajo de adaptación a la realidad de nuestra ciudad», y de ahí la importancia de la la organización de unos talleres como los que han comenzado hoy, «para  trabajar codo a codo los diferentes niveles de la administración pública con la empresa privada, la sociedad civil y la academia».