– Gracias, simpática– le solté desde el pasillo calculando una distancia prudencial que me permitiera escabullirme, si pretendía atraparme. En cuanto acabe la frase busqué la tranquilidad del dormitorio y cerr&ea...
Con la luz del nuevo día me levanté de un salto. Mi cuidado personal hubiese hecho palidecer a la mismísima Cleopatra: ducha, crema hidratante,atención máxima al peinado, desodorante, limpieza esmerada de dientes, gen...
Mientras caminaba por el pasillo en busca del bienestar de la cama, iba apagando a mi paso las luces de las estancias.
Crucé frente a la jaula y me paré unos minutos a contemplar las aves de su interior.
El nue...
Desayunar, eso era lo que tenía que hacer. Tenía previsto, hasta la hora del trabajo, salir a hacer algunas compras y visitar a Rosabel, una amiga de la infancia, para que pudiera contarme con todo lujo de detalles lo guapísimo y b...
Aquel día, de nuevo en casa, asalté con la ilusión de una adolescente los cosméticos recién adquiridos. Era obvio que mi arte en el maquillaje se limitaba a aplicar colorete y poco más, pero puse una silla cerc...
Y para acabar esta turra que os estoy dando con el problema de la vivienda, quisiera informaros que este es un mal de muchos y, por lo tanto, solo cabe el consuelo de tontos.
El toda Europa está pasando lo mismo: existe vivienda suficien...
Aquel día , de nuevo en casa, asalté con la ilusión de una adolescente los cosméticos recién adquiridos. Era obvio que mi arte en el maquillaje se limitaba a aplicarme colorete y poco más, pero puse una silla c...
Perdida en esas reflexiones, cerré la puerta y fui en busca de mi peluquería favorita. No era un local grande pero sí coqueto y luminoso. Tenía dos paredes pintadas de blanco: en una de ellas colgaban de forma armoniosa una ...
Reaccioné como siempre hacía cuando me gritaban: sintiéndome humillada, encogiéndome sobre mí misma e intentando desaparecer. Al fin, con un hilillo de voz, dije:
_ Es que no sé qué pasa. No acep...
Sentada en la cocina de mi casa, recuerdo, todavía no sé si con indignación o con cierta diversión, lo sucedido aquella mañana, hace ahora dos años.
En un viejo, descuidado y pequeño supermercado...
La soledad no escogida es una enfermedad crónica, la más pura esencia de la tristeza. La soledad es silencio. La soledad impuesta es un campo sembrado de almas tocadas por el abandono, que se apegan y doblegan como perros famélicos...
Apoyada con suficiencia en la pared blanca a su espalda, buscó la mirada de la otra persona, que una vez más se negaba de manera tozuda y consciente a hacer contacto visual con ella.
Por la forma en que se replegaba el cuerpo sobr...