La manifestación del 8M pinta de violeta las calles de Puerto de Sagunto

El domingo 8 de Marzo, las calles de Puerto de Sagunto se pintaron de violeta al acoger la manifestación del Día de la Mujer convocada por la Coordinadora Feminista del Camp de Morvedre. Más de 500 personas de la comarca participaron en los actos festivos y reivindicativos que durante la mañana se celebraron para conmemorar este día internacional bajo el lema ‘Feminisme per canviar el món’, como parte del programa con motivo del 8 de Marzo coordinado por el Área de Igualdad del Ayuntamiento de Sagunto.

La jornada comenzó a las 12 horas cuando, en la plaza de la Concordia, tuvo lugar el Círculo del Silencio ‘Caminem juntes per canviar el món’ a cargo de Morvedre Acull y que congregó a alrededor de 350 personas. Seguidamente, se inició la marcha convocada por la Coordinadora Feminista del Camp de Morvedre en la que participaron más de 500 personas entre anónimas y de colectivos como Amigas Supervivientes, Dones de Gilet, la Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de Gilet d’en Berenguer, o Iai@sFlautas. En la manifestación también marcharon miembros de la Corporación Municipal, encabezados por el alcalde de Sagunto y concejal de Igualdad, Darío Moreno.

La manifestación, en la que se pudieron leer y escuchar diferentes lemas reivindicativos, recorrió las avenidas Mediterráneo, Camp de Morvedre e Hispanidad hasta llegar a la rotonda Ramón de la Sota donde las manifestantes, la mayoría mujeres, interpretaron el himno feminista El violador eres tu. La marcha finalizó en el anfiteatro del Triángulo Umbral donde se leyó el manifiesto del 8 de Marzo.

Seguidamente, y como punto y final a la jornada reivindicativa del 8 de Marzo, Eva Bertomeu Compañía de Danza puso en escena el espectáculo U en el Triángulo Umbral, un autorretrato actual de una joven en base en su vieja vida donde Eva Bertomeu coreografía e interpreta ella sola la búsqueda de la perspectiva que le permita ver cómo llegó hasta allí. Esta representación cerró la edición de 2020 del Festival Fem(me) Dansa organizado por el Área de Igualdad y que puso en escena un total de 7 espectáculos de danza en diferentes puntos de la ciudad abiertos al público.

Al finalizar la manifestación se leyó el siguiente texto:

Manifiesto del 8 de Marzo

¡El movimiento feminista ha salido de nuevo a las calles para clamar contra todas las discriminaciones y violencias que sufrimos las mujeres cada día en todas partes! Y todas juntas, las que estamos aquí y las que no pueden estar, decimos no a este tipo de sociedad machista, racista, capitalista y colonialista.

Entendemos que el 8 de Marzo es importante, pero más importante es aun el proceso que llevamos a cabo diariamente para tejer redes feministas. Un proceso en el que reconocer y defender nuestros derechos desarrollando lazos de apoyo y solidaridad entre todas. Somos un grito global de diferentes pensamientos, estamos unidas contra el patriarcado y dispuestas a dar la batalla para construir unas vidas mejores. Queremos una vida con derechos todos los días del año; queremos cambiarlo todo, queremos estar todas, entendemos las diferentes realidades que nos atraviesan a cada una.

Sabemos que queda mucho por cambiar y por eso decimos:

-          Basta de violencia hacia las mujeres. Basta de asesinatos. Exigimos leyes que contemplen todas las formas de violencia contra las mujeres. Exigimos que se connsidere las violencias machistas como una cuestión que concierne al Estado y a toda la sociedad. Son 22 las mujeres asesinadas este 2020, con 32 denuncias al día en España por agresiones y abusos sexuales.

Señalamos y denunciamos la violencia sexual que nos afecta de manera aunque más marcada a mujeres en situación de vulnerabilidad, como son las mujeres migrantes, las trabajadoras domésticas, las mujeres con diversidad o las tuteladas. Denunciamos la justicia patriarcal que no nos considera personas de pleno derecho y que nos quiere dóciles, sumisas y calladas.

Luchamos para que las mujeres seamos propietarias de nuestros cuerpos diversos, alejados o no de la normalidad, propietarias de nuestros deseos y de nuestras decisiones, porque las personas disidentes sexuales, especialmente las mujeres transexuales, dejen de sufrir agresiones y múltiples violencias, y por una sociedad que respete y valore la diversidad funcional, al diversidad sexual, y la diversidad de identidad y/o expresión de género. Nuestros cuerpos no son mercancía ni objetos para ser cosificados y utilizados como reclamo, y nuestros procesos de vida no son enfermedades.

-          Queremos romper la división sexual del trabajo que nos condena a la precariedad, la discriminación laboral y los trabajos peor pagados, no remunerados, invisibles e ilegales. Reivindicamos que nuestra situación laboral nos permita desarrollar un proyecto vital con dignidad y autonomía; y que la ocupación se adapte a las necesidades de la vida porque el embarazo o los cuidados no puedan ser objeto de despido ni de marginación laboral.

Exigimos alternativas  para las trabajadoras migrantes en situación administrativa irregular. Exigimos las pensiones que nos hagan ganar, no más pensiones de miseria que nos obliguen a sufrir pobreza en la vejez.  Hacemos una mención especial a las mujeres mayores, a su sabiduría y sustento, que merece su derecho a conseguir un envejecimiento digno y con efectos y reconocimientos.

Luchemos per la ratificación del Convenio 189 de la OIT que regula el trabajo doméstico. Queremos que se visibilice y reconozca el valor y dignidad del trabajo doméstico y de cuidados como un bien social de primer orden.

-          Nos oponemos al neoliberalismo que se impone como un pensamiento  único a nivel mundial y que destroza nuestro planeta y nuestras vidas. Tenemos un papel primordial en la lucha contra el cambio climático y en la preservación de la biodiversidad, por eso, apostamos por la soberanía alimentaria de los pueblos, exigimos que la defensa de la vida se sitúe en el centro de la economía y de la política, y apoyamos a las luchas que protagonizan mujeres que defienden sus tierras, hasta arriesgar sus vidas, amenazadas por el extractivismo, las empresas transnacionales, y sus tratos de libre comercio.

-          Estamos en contra de la guerras, que son producto y extensión del patriarcado y del capitalismo por el control de los territorios y de las personas, y porque la consecuencia directa de las guerras son millones de mujeres refugiadas por todo el mundo, mujeres que estamos siendo victimizadas, olvidadas i violentadas. Estamos en contra de los estados autoritarios y represores que imponen leyes mordaza y criminalizan la protesta y la resistencia feminista.

-          Formamos parte de una sociedad diversa, multicultural, con una trayectoria de convivencia de diferentes personas y culturas desde hace siglos. Por eso denunciamos la Ley de Extranjería, las fronteras, el racismo y la xenofobia que atraviesa y recorre toda la sociedad. Exigimos el acogimiento de todas las personas migrantes y refugiadas, sea por motivo que sea, porque somos mujeres libres en territorios libres. Queremos un mundo sin muertes en el mar, sin muros, ni concertinas, ni CIEs, ni batidas racistas, porque ningún ser humano es ilegal.

-          Necesitamos sociedades donde la educación sea la clave. Exigimos que la perspectiva feminista sea transversal a todas las disciplinas y a todos los niveles; una educación libre de valores heteropatriarcales, así  como que la educación afectivo-sexual esté contemplada en el currículum escolar y sea integral, libre de estereotipos sexista, capacitista, racista y LGTBIfóbicos.

La memoria feminista tiene el poder y la responsabilidad de conectarnos con las genealogías de las luchas de las que nos preceden, visibilizando lo que históricamente ha estado invisibilizado desde una mirada patriarcal. Porque no se esperaba que sobreviviéramos, porque los silencios no nos protegieron y no nos protegerán.

Desde Rojava en Chile, México, Bolivia, Perú, Ecuador, Argentina, Brasil, Nicaragua, Palestina, India, Sudáfrica, Nigeria… los latidos de las mujeres que luchan en todo el mundo son nuestros latidos.

Proponemos otra manera de vivir, de estar en el mundo y de relacionarnos.

Sabemos que hace falta continuar avanzando. Nos sabemos fuertes y continuamos luchando.

El camino es largo y las movilizaciones continúan, juntémonos; luchemos y cuidémonos.

¡Juntas somos IMPARABLES!

¡Viva, viva, viva, la lucha feminista!