La Diputació de València ayudará a Villargordo del Cabriel a asfaltar calles y mejorar el polideportivo

El presidente de la Diputació de València, Vicent Mompó, visitó este jueves Villargordo del Cabriel, en la plana Utiel-Requena, en el marco de la ronda que inició por las comarcas valencianas desde que asumiera el cargo de máximo responsable de la corporación provincial. Mompó continúa su recorrido por los pueblos y ciudades “con la intención de conocer de cerca a sus responsables y las necesidades que tienen, porque es la mejor manera de poder ayudarles a través de una institución que está a su entera disposición”.

El alcalde de Villargordo, Galo Valle, acompañó a Mompó durante una visita que se inició en el ayuntamiento, donde el máximo responsable provincial firmó en el libro de honor del municipio. “Estamos muy agradecidos al presidente por su cercanía y el compromiso de ayudarnos a mejorar los servicios básicos y la calidad de vida de nuestros vecinos”, señaló Valle, quien fijó las necesidades a corto plazo en “el asfaltado de calles, la intervención en el polideportivo y la construcción de un almacén municipal”.

Para acometer estos y otros proyectos durante los próximos años, Villargordo del Cabriel dispone de una asignación de 916.569 euros del Pla Obert d’Inversions, 142.000 euros más que lo que recibió de la Diputación en los planes de inversión de la pasada legislatura. “Al igual que el resto de municipios, Villargordo dispondrá de más dinero para mejorar sus infraestructuras y servicios”, apuntó Mompó, quien destacó que “pese al incremento en las ayudas, lo más importante es la proximidad y la cobertura que va a recibir por nuestra parte para que ese dinero se traduzca en mejoras reales para los cerca de 600 habitantes del pueblo, sin que tengan que devolver ni un solo euro a la Diputación”.

Por su parte, Galo Valle valoró positivamente “la simplicidad y los plazos largos que nos da el nuevo plan de inversiones para pensar y ejecutar los proyectos”. En su opinión, “para los pueblos pequeños con poco personal, o técnicos compartidos, el Pla Obert a cuatro años es una idea fantástica que esperemos se pueda mantener en el futuro”.