La Diputació finaliza la ampliación de la carretera que comunica Campo Abajo y Titaguas
La obra, con una inversión de 2,2 millones de euros, ha servido para acondicionar un trazado estrecho y sin arcenes que es muy utilizado por los vecinos de la zona y los propietarios de campos de cultivo
La nueva vía, con tráfico predominante de vehículos agrícolas, cuenta con carriles de tres metros de anchura y arcenes de medio metro, con cuneta de seguridad hormigonada y sistemas de contención
La Diputació de València ha finalizado las obras de acondicionamiento y ampliación de la CV-345 en el tramo de cuatro quilómetros que comunica la pedanía de Campo Abajo con el municipio de Titaguas, en la comarca de La Serranía. De esta forma, el área de Infraestructuras que dirige Rafa García mejora la seguridad de una vía muy utilizada por los vecinos de la zona y los propietarios de campos de cultivo, con un tráfico predominante de vehículos agrícolas.
Con una inversión de algo más de dos millones de euros, la obra ha consistido en la ampliación de la calzada hasta los siete metros de anchura, con carriles de tres metros y arcenes de medio metro, acompañada de la mejora del firme y la rectificación puntual del trazado para conseguir una circulación más cómoda y segura.
El responsable provincial de Carreteras, Rafa García, ha explicado que la intervención “era muy necesaria para resolver los problemas que tenían los usuarios, principalmente propietarios de terrenos de cultivo con vehículos agrícolas, en un trazado sinuoso y estrecho, sin arcenes y con zonas de escasa visibilidad”.
La obra se ha ejecutado entre el punto quilométrico 49+7, en las proximidades del acceso a Campo Abajo, pedanía de Alpuente, y el punto quilométrico 53+8, en la glorieta de acceso al núcleo urbano de Titaguas. La mejora de la funcionalidad de todo el tramo ha incluido la construcción de una cuneta de seguridad hormigonada de un metro que da continuidad al arcén en el margen derecho, la instalación de sistemas de contención y la oportuna señalización horizontal y vertical.
En el tramo final de la actuación, desde la glorieta de Titaguas al cementerio de la localidad, se ha ejecutado un andén peatonal de tres metros de anchura, con una barrera de hormigón que lo separa de la calzada para reforzar la seguridad en el acceso al cementerio.
Los operarios han mejorado también las curvas que presentaban un radio más reducido, y ha sido necesaria la reposición de diferentes servicios afectados por las obras, desde la red de telefonía hasta el abastecimiento de agua en la población de Titaguas, repuesto con la instalación de una tubería de polietileno.