Alberic presenta la programación del Año Rafael Comenge
La Sala de Plenos del Ayuntamiento de Alberic acoge el jueves a partir de las 19 horas la presentación de los actos del Año Rafael Comenge Dalmau, al quien el equipo de gobierno ha querido dedicar el 2020 para subrayar el importante papel histórico del abogado, periodista y político valenciano que llegó a ser diputado en las Cortes Españolas durante la restauración borbónica. Al acto de mañana acudirán varios miembros de la familia y representantes del ejecutivo local, encabezados por el alcalde, Toño Carratalá; así como miembros de la comisión especializada creada para la organización de múltiples actos que se irán repartiendo a lo largo del año y que permitirán conocer el personaje a través de actividades como el teatro, la educación, la muestra expositiva o la edición de libros. Antes del acto de presentación, tendrá lugar un responso por Rafael Comenge en el Cementerio Municipal a las 17 horas.
Rafael Comenge fue mucho más que un político español de los últimos años del siglo diecinueve y principios del veinte. Nacido en Alberic el 16 de julio de 1865, se licenció en Derecho por la Universidad de Valencia y en Filosofía y Letras por la Universidad de Madrid. Se doctoró en ambas titulaciones. El joven liberal fue pasante en el bufete de un insigne abogado, que llegaría a ser presidente del Consejo de Ministros, Segismundo Moret. Empezó a impartir conferencias en el Ateneo de Madrid, reservado para grandes intelectuales. También empezó muy pronto a colaborar con la prensa y por ejemplo con La Revista Contemporánea lo hizo incluso antes de ser considerado mayor de edad. Después llegarían intervenciones en otras publicaciones como El Progreso, La Reforma, El Mercantil Valenciano, Las Provincias, Diario de Valencia o El Heraldo de Madrid. Su ideología política le llevó a afiliarse al Partido Liberal y fue elegido diputado para las Cortes españolas por la provincia de Badajoz, convirtiéndose por entonces en el diputado más joven, con tan solo veintiséis años. Sus críticas al gobierno de Cánovas del Castillo incluso le valieron un encarcelamiento. Llegó a ser Fiscal Contencioso en Filipinas, secretario de la embajada en París y gobernador civil de Canarias, Granada, Valencia y Málaga, además de diputado por el distrito de Alzira en las elecciones generales españolas de 1916. Con el tiempo desarrolló una gran carrera literaria con obras como “Viaje a Japón”, “Antología de las Cortes de Cádiz”, “El juego, código rural”, “El honrado sin honra”, “Sueños y teorías” o “Historia de la familia y la propiedad”, entre otros.