¿Puede hundirse el suelo por la sequía en la Comunitat Valenciana? Alertan del riesgo de derrumbes
Vox ha presentado una PNL y alerta de que paradójicamente la sobreexplotación de acuíferos puede incrementar el riesgo de más inundaciones
La Comunitat Valenciana vive una larga temporada de sequía, que hacer llegar al territorio autonómico al verano en una mala situación, pese a las últimas lluvias de primavera que han paliado algo la situación.
Campos secos, riesgo de incendios, restricciones en el consumo de agua potable e incluso la muerte del ganado son algunas de las consecuencias que ya se están viviendo en varias zonas.
Pero, una de las cuestiones que son más desconocidas es el riesgo de que el suelo se hunda bajo nuestros pies cuando se vacían los acuíferos que hay bajo tierra. E incluso, paradójicamente, que esta situación aumente el riesgo de inundaciones.
A este respecto, el Grupo Parlamentario VOX en las Cortes Valencianas ha presentado una Proposición No de Ley (PNL) para instar al Gobierno de España a que se garantice el agua suficiente en aquellas zonas en riesgo de hundimiento que permita aliviar además la presión sobre los acuíferos, garantizando la sostenibilidad económica de la actividad del regadío.
Realizar, en coordinación con el resto de comunidades autónomas, nuevos planes de emergencia que tengan en cuenta este hundimiento de las tierras, que conlleva un mayor riesgo de inundación de estas zonas. Así como defender la soberanía alimentaria anteponiendo el comercio de proximidad y la producción nacional frente a las importaciones de terceros países.
En esta línea, la diputada del GP VOX en las Cortes Valencianas, Ana Bellver, ha afirmado que “debido al injusto trato del Gobierno de España en la gestión del agua a las regiones del Levante español, nuestros acuíferos están soportante las necesidades de la actividad del regadío en unos límites que empiezan a preocupar al sector.”
“La sobreexplotación de los acuíferos puede causar la contaminación del agua subterránea por la intrusión marina, la desecación de ecosistemas húmedos y el incremento del riesgo de más inundaciones. Provoca que, dependiendo del tipo de terreno, se reduzca el espacio donde se acumula el agua. El acuífero pierde así capacidad de almacenaje y el suelo se hunde. A este hundimiento se le conoce como subsidencia.”
Esta PNL recuerda que no se puede prescindir del agua en la agricultura, porque es fundamental para la producción y desempeña un papel importante en la seguridad alimentaria. La agricultura de regadío representa el 20% del total de la superficie cultivada y aporta hasta el 40% de la producción total de alimentos en todo el mundo.
Para resolver los desafíos del futuro, es necesario reconsiderar la gestión del agua en el sector agrícola y su reposicionamiento en la gestión de los recursos hídricos en general. Se debe cumplir esto porque los regantes son los que hacen posible la soberanía alimentaria española, que es el derecho que tienen las naciones a definir sus propias políticas agrícolas y alimentarias sin interferencias externas.