Violencia de género durante el confinamiento: Medidas de prevención y ayuda

Desde el año 2019, Puçol participa en las actividades derivadas del Pacto Contra la Violencia de Género aprobado por todos los grupos políticos en las Cortes Generales: un conjunto de medidas para sensibilizar a la sociedad, así como prevenir y ayudar a víctimas de la violencia de género. Durante el estado de alarma, desde Bienestar Social se mantiene el seguimiento y ayuda, aunque vía telefónica, para paliar los efectos negativos del confinamiento forzado.

Son muchas las medidas contra la violencia de género que se desarrollan en Puçol desde la entrada en el pacto contra esta lacra social promovido por el Ministerio de Igualdad: atención psicológica a víctimas, detección y prevención ante posibles casos de maltrato, talleres educativos con alumnos de Secundaria, campañas informativas...

Además de todas aquellas actividades programadas para los próximos meses que se han suspendido por motivo del estado de alarma: una escape room para jóvenes en el Espai Jove, un taller de hip-hop protagonizado por mujeres maltratadas, un concurso de fotografía en redes sociales, un taller de defensa personal...

La pandemia del Covid-19, no obstante, está suponiendo un aumento de las dificultades debido al aislamiento forzado en los hogares y también al cierre de muchos servicios, lo que ha llevado al área de Bienestar Social a adaptar sus medidas habituales de prevención y respuesta frente a la violencia de género. Como siempre, se están realizando en colaboración con los distintos cuerpos de seguridad locales.

«El confinamiento puede agravar algunos casos porque hay víctimas que de repente tienen que convivir con el agresor durante todo el día, y puede parecer que no hay salida», explica Amparo Ferrer, técnico de Bienestar Social. Sin embargo, los servicios de protección y ayuda continúan disponibles, aunque vía telefónica.

«Todo funciona igual: la atención y las prestaciones y ayudas económicas se mantienen, pero el procedimiento cambia», comenta la responsable, pues se han abierto distintos canales telefónicos y online, como el correo electrónico o el WhatsApp, mantener el servicio. «Intentamos dar las máximas facilidades en estos momentos».

Cuando es necesario, se les facilitan recursos y contactos de emergencia, «aunque también estamos a disposición de ellas todo el tiempo necesario, como a la de cualquier ciudadano». Y es que desde esta área se adaptan al tipo de necesidades sociales para «ofrecer un buen servicio a la población», apunta Ferrer.

La ayuda psicológica también está siendo fundamental durante esta etapa de confinamiento, de modo que Bienestar Social deriva a las víctimas al servicio de atención psicológica, gestionado por la especialista Esperanza García, cuando el caso así lo requiere. Y también se ofrece un servicio jurídico, a cargo de la abogada Chelo Olmos, para asesorar en la realización de denuncias u otros trámites.

La Policía Local, por su parte, se mantiene en contacto constante con las víctimas y realiza con ellas entrevistas quincenales con el objetivo de conocer su situación y prevenir distintas formas de maltrato. Además, se controla el cumplimiento de las órdenes de alejamiento y el posible contacto con el agresor.

«Desde la Concejalía de la Mujer, junto con la Policía Local y la Guardia Civil, se hace un seguimiento constante de los casos activos de violencia de género, al mismo tiempo que estamos muy pendientes de los posibles casos que se puedan producir, adoptando todas las medidas posibles para evitarlos», señala Paz Carceller, concejal de la Mujer. «Es todo este trabajo de prevención está siendo muy importante la colaboración de los vecinos».

Parte de estas actuaciones y del resto de actividades para la Mujer están financiadas por el Ministerio de Igualdad, que destinó a Puçol, el pasado junio de 2019, un presupuesto para un año de 20.000 euros, con cargo al Pacto de Estado Contra la Violencia de Género. En definitiva, una unión de fuerzas locales y supralocales que intenta paliar los efectos de esta lacra a corto plazo y, por supuesto, terminar con ella a largo plazo.