Petición directa a la industria automovilística valenciana: cinturones de seguridad para embarazadas
Les Corts aprueba esta propuesta de Compromís. Los accidentes de tráfico son la primera causa de muerte fetal relacionada con el traumatismo materno
La comisión de Industria de Les Corts ha aprobado hoy (con los votos a favor de los grupos del Botánico, la abstención del PP y en contra de Vox y C’s) una proposición no de ley de Compromís con que se reclama una mayor concienciación a la industria automovilística valenciana en la mejora de la seguridad de todas las personas usuarias de vehículos incorporando la perspectiva de género.
Esta iniciativa parlamentaria parte de aquello que recoge el estudio realizado por el Instituto de Biomecánica de València (IBV) ‘El vehículo autónomo visto con gafas violeta’ en el que se establecen diferentes opciones para hacer los automóviles más inclusivos en su fabricación y diseño.
La industria automovilística siempre ha tomado como referencia un tipo de hombre medio a la hora de hacer el diseño del interior del vehículo, así como de los sistemas de seguridad. Y esto provoca ciertas incomodidades y riesgos para las mujeres, niños y niñas y personas con movilidad reducida. Siendo las mujeres embarazadas las peor paradas puesto que el informe del IBV recoge que todavía no existe un cinturón de seguridad adecuado para ellas.
Además, el mismo estudio afirma que una mujer tiene un 47 por ciento más de posibilidades de sufrir un accidente que un hombre. Y una mujer tiene un 71 por ciento más de posibilidades de sufrir lesiones moderadas e, incluso, un 17 por ciento más de posibilidades de morir frente a las de un hombre. La diferencia hay que buscarla en el diseño e incluso en los controles de seguridad de los vehículos.
Los vehículos se diseñan de acuerdo con los cuerpos y a las necesidades de los hombres, esperando que las mujeres se adapten a lo que ha sido diseñado solo para ellos. Esta perspectiva genera graves problemas de seguridad para las mujeres así como por todas las personas que se salgan del falso modelo universal del hombre normativo.
Actualmente, no se exigen por la administración, ni en los Estados Unidos ni en la UE, ensayos de colisiones con maniquíes que representen la morfología de las mujeres embarazadas. De hecho, a pesar de que los accidentes de tráfico son la primera causa de muerte fetal relacionada con el traumatismo materno, todavía no se ha desarrollado un cinturón de seguridad adecuado para las mujeres embarazadas. Esto solo se explica cómo una consecuencia más de las desigualdades de género que perjudican incluso la vida de las mujeres.
Por eso con la proposición aprobada hoy Les Corts instan a que se incorporen a los futuros acuerdos y convenios con el sector automovilístico los objetivos relativos a las recomendaciones realizadas por el IBV para impulsar la fabricación, diseño y ensamblaje de vehículos inclusivos desde una perspectiva de género. Todo con el objetivo de mejorar la vida de las personas, y la de las mujeres en concreto, dando la difusión y atención oportunas.
