Mazón muestra su compromiso por la defensa de la agricultura como verdadera seña de identidad de la Comunitat Valenciana
Apuesta por la reciprocidad en las exigencias europeas, la cultura del trasvase, “impuestos cero” al campo, el uso equilibrado de fertilizantes y la renovación de las estructuras agrarias
Defiende el equilibrio entre la actividad agraria y el medio natural, y muestra su preocupación por las presiones que sufre el sector agrario al ser señalado como enemigo del medio ambiente
Reitera la necesidad de que el agua sea “uno de los elementos irrenunciables de un pacto de todas las fuerzas políticas”
El president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha mostrado su “absoluto compromiso” por la defensa de la agricultura como “verdadera seña de identidad” de la Comunitat Valenciana.
Así se ha pronunciado durante la clausura del II Encuentro Internacional Renowagro celebrado en València bajo el título ‘Recursos renovables para la sostenibilidad del sector agroalimentario’, en el que han participado un millar de personas entre productores, investigadores, distribuidores, estudiantes y agricultores.
Carlos Mazón ha defendido la reciprocidad de las exigencias europeas entre productos valencianos y los procedentes de otros países, y la cultura del trasvase de recursos hídricos como “ejemplo de ecologismo real, vida, sostenibilidad y futuro”.
Sobre este último aspecto, el president ha reiterado la necesidad de que el agua sea “uno de los elementos irrenunciables de un pacto de todas las fuerzas políticas para avanzar en unos acuerdos comunes, al margen de otras discrepancias”, como propuso esta semana en Les Corts.
Asimismo, ha abogado por la estrategia de “impuestos cero al campo” y la eliminación de la fiscalidad a la sucesión, propiciando el relevo generacional; un uso equilibrado de los fertilizantes, impulsando también el uso de tratamientos biológicos; y la renovación de la legislación de las estructuras agrarias para mejorar la competitividad del campo.
Equilibrio en los usos del territorio
En el transcurso del acto, el president ha considerado esencial propiciar un equilibrio en el uso del territorio que permita mantener las actividades económicas tales como la agricultura, la industria, el comercio, y aquellas “punteras en la economía del conocimiento”.
Asimismo, ha mostrado su preocupación “por las presiones que sufre el sector agrario al ser cuestionado permanentemente y apuntado como enemigos del medio ambiente”, por lo que ha considerado “esencial” continuar apostando por la eficiencia en el uso del agua, “como siempre se ha hecho, fruto de la necesidad”, y por el desarrollo “más sostenible” de la actividad agraria, para garantizar su futuro.
El jefe del Consell ha asegurado que la actividad agraria “no puede acabar siendo una parte residual de nuestra actividad económica”, y ha explicado la contribución de la agricultura para evitar la desertificación, para luchar contra el cambio climático y evitar incendios.
Del mismo modo, Carlos Mazón ha señalado que “un territorio que permite un uso inteligente de los espacios acredita una sociedad inteligente”, por ello ha insistido en defender “una nueva consideración del territorio, equilibrada e integral”, frente a la etapa anterior en la que “se demonizaba el ladrillo, se ponían trabas a la ampliación del Puerto, se consideraba el litoral como un espacio intocable, y se asumía la desatención de nuestro déficit hídrico en el campo”.