Jefe de Neumología del Hospital de Alicante: “Si los valencianos no fumaran, el 40% de las camas de mi hospital estarían vacías”
Entrevista con el Doctor Joan Gil para hablar de los virus respiratorios, de cómo la temporada de infecciones se ha adelantado este año y de cómo ha cambiado la pandemia el sistema sanitario valenciano
La temporada de virus respiratorios se ha adelantado este año y se está viendo en los hospitales valencianos. Normalmente, hasta la llegada del frío no se produce un aumento de las infecciones de este tipo, pero esta temporada está siendo excepcional y los centros sanitarios ya sufren presión asistencial.
El perfil del paciente que ingresa es el de personas con enfermedades crónicas que, debido a una infección respiratoria, empeoran rápidamente. A esto hay que sumar que hay un nuevo virus en circulación, el covid, que convive ahora con la gripe -cuya campaña de vacunación está yendo según lo previsto- y el VRS, causante de la bronquiolitis en bebés y que también está disparando la presión en pediatría, tal y como les contaba elperiodic.com.
La temporada de invierno se presenta complicada, pero hay medidas que los ciudadanos podemos llevar a cabo para evitar una mayor circulación de los virus. Además, a medio y largo plazo está en nuestras manos decidir cómo queremos envejecer, sanos o enfermos. Un buen cuidado de nuestra salud hoy, es una vejez sana mañana. Nos lo explica el Doctor Joan Gil, jefe del Servicio de Neumología del Hospital General Universitario Dr. Balmis de Alicante, en esta entrevista en la que nos explica qué está pasando en estos momentos, por qué hay más enfermos con virus respiratorios y cómo ha cambiado la pandemia esta situación:
¿Se ha adelantado la temporada de virus respiratorios? ¿A qué se debe?
La pregunta no es fácil de responder. Habitualmente esperamos la llegada de los virus respiratorios con el frío y aquí, sin haber llegado todavía, parece que tenemos algo más de infección que en épocas precedentes.
La explicación de esto es compleja: los virus que nos preocupan son el de la covid, la gripe y el respiratorio sincitial -el responsable de las bronquiolitis de los niños- y probablemente la transmisión de estos virus depende de la interacción que tienen entre ellos. Durante estos dos años el covid ha tenido una preponderancia en nuestras vías respiratorias y no ha permitido que los otros virus se establecieran. Además, ha habido una serie de medidas para evitar la transmisión que también han influido. Yo diría que sí, que tenemos más infección respiratoria por virus que en otra época, pero aun así los picos de incidencia de la enfermedad van a llegar con el frío y eso seguramente no lo tendremos hasta las primeras semanas del año.
¿Qué tipo de virus están viendo en consulta?
El respiratorio sincitial (VRS) es un virus que afecta fundamentalmente a niños pequeños, prematuros, recién nacidos y de menos de dos años de edad y los cuadros graves en menores de seis meses de edad. Yo no veo pacientes con VRS en hospitalización porque los ven los pediatras. Respecto a los adultos, el virus de la covid y de la gripe son los que vemos en consulta. Hay sospecha de que el VRS también puede producir infecciones no graves, pero que descompensan a enfermedades crónicas en pacientes ancianos. Pero la evidencia científica en este momento es baja y tenemos que considerar que el VRS es una enfermedad de niños.
¿Somos entonces menos inmunes que antes de la pandemia debido a la protección que hemos llevado estos dos años y a la ausencia de la circulación de otros virus?
Creo que aquí nos tenemos que referir a la gripe únicamente porque el VRS es un virus que produce enfermedad en el primer contacto con el niño y como no hay vacunas para el VRS ni inmunidad lo dejamos fuera de esta consideración. Además, respecto al covid la población está mayormente vacunada y se ha mantenido la inmunidad. Por tanto, esto habría que contestarlo solo para la gripe y la respuesta no está clara. Parece que tanto las vacunaciones sucesivas como los episodios de gripe dejan algún grado de inmunidad bajo, es decir, hay un recuerdo inmunitario de vacunas e infecciones que han ocurrido bastantes años atrás. A mí me parece -es una opinión personal y tengo compañeros que tienen ideas diferentes- que no se ha perdido inmunidad, no nos enfrentamos a una gripe peor por haber estado dos años sin estar en contacto con la gripe. De hecho, en los países del hemisferio sur en los que están teniendo ya gripe este año, están comunicando tasas altas de gripe pero no mas grave de la que conocemos hasta ahora. Por tanto yo diría que, de forma global, esa falta de contacto con el virus de la gripe no va a tener consecuencias clínicas para la población en cuanto a la gravedad.
Comentaba que la temporada de virus ha llegado antes. ¿Cree entonces que la campaña de la gripe debería haberse comenzado antes? ¿Qué balance hace de la misma?
Esto es algo que nos preocupa en el hospital al grupo que trabajamos en infección respiratoria. La noticia que yo tengo es que la campaña de vacunación antigripal en atención primaria se está llevando según los tiempos que están pensados, con el objetivo de que a finales de diciembre esté toda la población susceptible vacunada. Creo que no llegamos tarde, si se hubiera empezado antes habría sido mejor, pero no llegamos tarde.
¿Ha cambiado algo respecto a antes de la pandemia?
Yo creo que lo que la pandemia ha cambiado es que el sistema sanitario ha estado sometido a una sobrecarga de trabajo muy importante en los dos últimos años y que, desde luego, eso ha repercutido en la asistencia general de los procesos que habitualmente teníamos en el hospital. Recuperar ese trabajo requiere recursos y requiere tiempo. Además, ahora tenemos un nuevo virus que va a circular y parece que se va a quedar con nosotros. El covid va a producir enfermedad, probablemente no grave si estamos vacunados, pero va a traer pacientes crónicos al hospital. De hecho es lo que está ocurriendo, tenemos pacientes ingresados con covid en los que el 100% padecen enfermedades crónicas y se descompensan por la infección respiratoria. Casi da lo mismo que sea gripe o covid u otro virus.
Ha cambiado que tenemos un sistema de salud con una presión muy alta, que estamos trabajando siempre muy cercanos al límite máximo del rendimiento de la atención sanitaria y que somos frágiles. cualquier pequeño problema es capaz de tensar otra vez EL SISTEMA y poner a prueba cómo funciona el hospital. Las unidades de urgencias, por ejemplo, tienen una muy importante carga de trabajo y aun no ha llegado el frío. Cuando llegue el frío y tengamos más pacientes infectados por covid y gripe, desde luego nos vamos a encontrar en una situación complicada. El sistema de salud sale sobrecargado, herido y diciendo que es importante que las autoridades sigan reforzando el sistema público de salud porque seguimos estando al límite.
¿Cuál es el perfil del paciente que ingresa en su unidad en estos momentos?
Son pacientes que, por causa de una o varias enfermedades crónicas, porque son ancianos o porque tienen problemática social y tienen un menor nivel de autocuidado que la población general, vienen agudizados por una infección respiratoria, sea cual sea el virus que lo desencadene. Son pacientes que, con una infección respiratoria que para un adulto sano es banal, para ellos significa empeorar rápidamente el estado de salud.
¿Qué mensaje de prevención se puede enviar a la población?
Es muy importante transmitirle que de su actuación depende también lo que nos vamos a encontrar. ¿Qué cosas puede hacer la población? Aquella que es de riesgo tiene que vacunarse para la gripe y el covid. A partir de ahí, hay que acordarse que ambos virus van a circular entre la población general durante los próximos meses. Recomendamos usar mascarillas en situaciones en las que la proximidad entre personas facilita la transmisión porque esto contribuirá a disminuir el número de infecciones y por tanto, la carga de trabajo en atención primaria y hospitales.
Hay que hablar también de a medio y largo plazo: es importante que la población llegue a una cierta edad en buenas condiciones de salud, mejores de las que llega ahora. No vale ponernos controlar el peso a partir de los sententa años. A partir de los cincuenta años hay que controlar calorías, alimentación, evitar alimentos elaborados, acudir a las legumbres, frutas y verduras, mantener un buen peso y un buen ejercicio físico. Por ejemplo, caminar todos los días una hora hace que haya menos hipertensión, diabetes y enfermedades crónicas. Y cuanta menos población susceptible haya, menos sufrirán los propios pacientes y el sistema sanitario.
Y, por supuesto, el tabaco, que está en la raíz de la mayor parte de las enfermedades pulmonares y cardiovasculares. El tabaco trae a los pacientes a partir de los 60 años al hospital. Si en los últimos cuarenta años ningún valenciano hubiera fumado nada, el 40% de las camas de mi hospital estarían vacías.
Aunque es una pregunta redundante puesto que ya lo ha ido desgranando a lo largo de toda la entrevista. Me gustaría terminar con una previsión, si es posible hacerla. ¿Cómo prevén que va a ser la temporada de invierno?
Va a ser mala como han sido malas los inviernos de los últimos 20 años. El sistema sanitario se ve tensionado por la descompensación de los pacientes crónicos y eso hace que la atención primaria esté llena, que las urgencias hospitalarias estén colapsadas y que nos quedemos sin camas en el hospital. Esto sin complicaciones, pero como haya alguna y nos encontremos algo nuevo y diferente, entonces será mucho peor. Las temporadas de invierno en el sistema sanitario nunca son buenas.