Historias detrás de una barra: crónica de una muerte anunciada
Hosteleros, camareros y trabajadores del sector nos cuentan la dramática situación que viven sus negocios
España es el país con más bares y restaurantes por persona de todo el mundo: uno por cada 175 habitantes, sumando en total 277.539 locales, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Pero muchos de ellos, hoy no han podido abrir.
Son familias, amigos, compañeros de negocio, empresarios de toda la vida, jóvenes emprendiendo, otros a punto de jubilarse, amigos… miles de historias que hay detrás de cada barra de bar, de un cartel de menú, de la puerta de una cafetería o de una gran masía de bodas. La crisis de la pandemia les ha golpeado a todos de frente, sin diferencias.
El sector hostelero vive una ruina sin precedentes: 2.000 negocios que han cerrado ya en la Comunitat Valenciana y otros 10.000 en riesgo de bajar la persiana definitivamente si no cambia la situación en los próximos meses. Algo que, a todas luces, no parece que vaya a ocurrir.
Elperiodic.com cubrió este jueves la manifestación que convocó la hostelería de España con protestas en las principales ciudades. En Valencia, decenas de empresarios y trabajadores se reunieron para pedir a los políticos un paquete de medidas y ayudas que intenten paliar un daño que ya, de por sí, es irremediable. Aquí recogemos lo que nos contaron:
“Con el ERTE no podemos afrontar las deudas”
Lidia es trabajadora de una gran empresa del sector hostelero y comenta cómo las restricciones de aforo están mermando más las capacidades de una empresa que ya venía sufriendo la caída de ventas: “Trabajo en una empresa de hostelería muy importante pero con las restricciones del 30% de aforo estamos en una situación insostenible. La empresas intenta tirar pero no pueden tenernos a todos y con el ERTE y la reducción de horas es imposible llegar a todo”.
Para Lidia la situación que estamos viviendo es incomprensible: “La mayoría somos padres de familia, sin pagar alquileres, hipotecas y tengo algún compañero con orden de desahucio. No entendemos cómo hemos llegado hasta aquí”.
“Llevamos nueve meses de agonía lenta”
“La situación es muy dramática, especialmente desde la semana pasada que se redujeron los aforos. Vamos cara al invierno, con terrazas a un 50% y dentro del restaurante es inviable”, lamenta Nuria Sanz, dueña de un restaurante en Valencia y miembro de la Federación de Hostelería de Valencia.
Nuria reconoce que lo que están aguantando, tanto ella como muchos compañeros, es por los trabajadores que dependen de sus negocios: “Estamos resistiendo por nuestros empleados, porque son nuestro equipo y te aseguro que el 99% de hosteleros que estamos aquí llevamos nueve meses sin cobrar”.
Efecto dominó
Los hosteleros hablan del efecto dominó que esta crisis sanitaria y económica está teniendo en el sector: “Cuando tu vas a cenar a un restaurante vas a la peluquería, te compras un vestido, coges un taxi…”. Todos ellos, negocios que se ven abocados al mismo futuro que el de la hostelería, pues buena parte de sus ingresos depende de los eventos del fin de semana.
“En octubre empezó a remontar y entonces volvieron las restricciones”
Sara y Celeste abrieron hace seis años un restaurante en la zona de Aragón de Valencia y este año había empezado siendo el mejor desde su nacimiento, hasta que llegó la pandemia: “En marzo nos metimos en casa y hemos aguantado porque somos un local familiar, con tres hermanas y una trabajadora que sigue en el ERTE todavía.
Sara nos explica, visiblemente emocionada, que no ve el futuro: “Aguantamos julio, agosto y septiembre para pagar las deudas que teníamos y justo en octubre que estaba empezando a remontar, volvieron las restricciones. Pero a pesar de que no hay ingresos, tenemos que seguir pagándolo todo y los políticos no dejan de anunciar ayudas que nunca nos llegan”.
Esta hostelera, madre soltera de dos hijos lo tiene claro: “Si sigue así cerraremos, no puedo trabajar para endeudarme, y es lo que estoy haciendo ahora”.