Compromís denuncia las trabas de Francia al Corredor Mediterráneo: “No podemos tolerar plazos hasta el 2042"
Marzà asegura que "hay que evitar que Francia sea el cuello de botella"
El diputado de Compromís en el Parlamento Europeo, Vicent Marzà, ha comenzado hoy su participación en una misión oficial de la Comisión de Transporte y Turismo del Parlamento Europeo en Marsella y Niza, que centra sus esfuerzos en denunciar los inaceptables retrasos en el desarrollo del Corredor Mediterráneo en territorio francés. Marzà ha calificado de "urgente" la ejecución de este proyecto, esencial para la economía del País Valencià y para el equilibrio competitivo del transporte de mercancías en toda Europa.
Durante la visita a la terminal ferroviaria de Saint-Charles, en Marsella, Marzà ha recalcado la necesidad de "convertir al Corredor Mediterráneo en una realidad y evitar que Francia sea el cuello de botella que impide la conexión eficaz del sur de Europa." Asimismo, el diputado ha participado en varios encuentros con autoridades locales y representantes de la SNCF, la empresa nacional de ferrocarriles francesa, donde ha puesto sobre la mesa los daños económicos que estos retrasos conllevan: “No podemos tolerar plazos de finalización hasta el 2042 por parte de Francia, cuando la UE fija la fecha límite en 2030.”
Marzà ha pedido igualmente que la Comisión Europea establezca mecanismos de seguimiento más estrictos sobre la inversión y la construcción de infraestructuras cofinanciadas a través del programa Connecting Europe Facility (CEF) y la Red Transeuropea de Transporte (TEN-T), entre ellos incluye el Corredor Mediterráneo. "Necesitamos garantías de que los fondos de la UE se destinan a la finalización de las obras en los plazos acordados y que se prioriza un transporte ferroviario potente y competitivo. En Europa, el Corredor Mediterráneo no puede ser una asignatura pendiente eternamente para Francia", ha añadido Marzà.
Marzà y la delegación continuarán estos días la misión europea en Niza, donde abordarán con las autoridades locales el impacto del turismo de masas, el aumento de cruceros y la expansión del aeropuerto, así como las consecuencias medioambientales y sociales que éstos modelos pueden generarse tanto en Niza como en otras ciudades mediterráneas.
