La Generalitat avanza en la tercera fase del plan de retirada de residuos con el vaciado del punto de transferencia de Catarroja
Los residuos de los puntos de acopio local y los puntos de transferencia son trasladados a los vertederos
La Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio avanza en la tercera y última fase del Plan de Residuos de la Generalitat con el vaciado y cierre del punto de transferencia situado en Catarroja.
El director general de Calidad y Educación Ambiental, Jorge Blanco, ha destacado que el objetivo de esta tercera fase es el vaciado progresivo de los puntos de acopio local en primer lugar y, posteriormente, de los puntos de transferencia. Se ha dado prioridad al punto de Catarroja, ha explicado Blanco, “al encontrarse en un polígono industrial. A continuación, se actuará en el punto de Picassent y en el de Manises-Quart de Poblet”.
El proceso, que se ha confiado a empresas especializadas para garantizar el correcto manejo de los residuos, ha comenzado esta semana en Catarroja con el traslado de los residuos al vertedero de Xixona y los vehículos a un centro autorizado de tratamiento (CAT). Mientras tanto, los puntos de transferencia de Hornillos, Picassent y Manises-Quart de Poblet permanecerán abiertos para facilitar una retirada organizada y progresiva.
Una vez finalizado el vaciado del punto de Catarroja, la segunda acción se llevará a cabo en Picassent, donde se procederá al vaciado de enseres para trasladarlos a su vertedero en Villena, mientras que los vehículos también serán dirigidos a un CAT autorizado. Por último, se procederá al cierre de Manises-Quart de Poblet y se trasladarán los residuos a Caudete, manteniendo abierto el punto de Hornillos.
“La finalidad del proceso es restablecer la normalidad en las zonas afectadas, lo que implica la retirada gradual de enseres, objetos voluminosos y lodos, así como el cierre de los centros de tratamiento”, ha destacado Blanco.
Las empresas especializadas contratadas para el proceso realizarán el ciclo integral de la gestión de residuos, desde la recogida, el tratamiento y la eliminación final en vertederos autorizados.
A medida que se avance en esta fase, se pretende que los servicios municipales, que operaban a través de contratas para la recolección de residuos, retomen su funcionamiento habitual en estas poblaciones, tal y como lo hacían antes de la riada.
En lo que respecta a los lodos, la Conselleria también ha habilitado zonas autorizadas para su vertido y se trabaja en un plan que permita su deshidratación y recuperación de tierras, así como la separación de residuos impropios mediante procesos de cribado.
Balance fase I y II
Durante las fases I y II del plan, se han retirado más de 500.000 toneladas de residuos de las zonas afectadas. En las últimas semanas, los equipos han evacuado una media de 15.000 toneladas diarias, lo que ha permitido despejar 767 viales obstruidos, mejorando así la movilidad y la seguridad en las áreas afectadas.
De forma paralela, la Conselleria puso en marcha la gestión de lodos con puntos de depósito habilitados en Picassent y Manises, con los equipos trabajando de forma ininterrumpida para normalizar la situación en los municipios más impactados. También se ha creado un servicio especializado para la recogida y gestión de residuos peligrosos, destacando la retirada de importantes cantidades en l’Albufera.