El sector pesquero valenciano exige un plan global de viabilidad en el Mediterráneo
Más de 355 embarcaciones y casi 1.000 marineros se han concentrado en los puertos de Castellón, Cullera y la Vila Joiosa
Más de 355 embarcaciones y más de 930 marineros nos concentramos hoy en los puertos de Castelló, Cullera y Vilajoyosa, como representación del sector en la Comunitat Valenciana se han sumado al amarre de flota como rechazo al Plan de Gestión de la Pesca Demersal para el Mediterráneo Occidental, aprobado por la Unión Europea en el año 2019 y que afecta de pleno a la flota de arrastre, sin olvidar los efectos colaterales sobre otras modalidades tradicionales y organizaciones representativas.
La Unión Europea considera como único y exclusivo responsable de la situación de los recursos pesqueros del mediterráneo a nuestra flota de arrastre, nada mas lejos de la realidad olvidando conscientemente otros factores, como son la contaminación, el cambio climático y la irrupción de flotas de otros países, según ha señalado la Comisión Interfederativa de Cofradías de Pescadores de la Comunitat Valenciana (COINCOPESCA)
Este Plan, tras las dos reducciones de esfuerzo ya aprobadas en los dos últimos años, sólo les permite trabajar entre 150 y 170 días, lo que hace totalmente inviable su trabajo y les aboca, irremediablemente "a la total desaparición del sector". Por lo que "si se aplica el Plan de la Unión Europea las cofradías de pescadores en todo el mediterráneo español y especialmente en la Comunitat Valenciana, van a pasar a la historia".
"El límite de días para faenar afectará de igual modo a marineros y armadores. Todos ellos y el futuro de sus familias depende del número de días que pueden salir a faenar. Los días que impone la Unión Europea harán inviables cualquier actividad pesquera. Y las autoridades lo saben porque se lo hemos manifestado en reiteradas ocasiones", han continuado.
Y añaden que "la Unión Europea quiere que las flotas de arrastre del Mediterráneo faenen cada vez menos días". "Quieren reducir nuestra actividad un 40%, el doble que ahora. Con estas limitaciones están en peligro: la pesca como actividad, las cofradías de pescadores, la proximidad del producto al consumidor, la restauración asociada a las especies propias de la cada modalidad, y en definitiva toda una cultura, una forma de vida y, en definitiva, el futuro de miles de familias que dependen del sector pesquero", apuntan.
Por ello, reivindican que el Gobierno de España promueva la elaboración e implantación de un plan global de viabilidad de la pesca en el Mediterráneo ante la Unión Europea, la modificación del Plan de Gestión, que modifique la Orden Ministerial en cuanto al reparto de los días de pesca de acuerdo con las peticiones formuladas por el sector pesquero del Mediterráneo, tratando a los días como medida técnica y no como derechos de pesca, que admita la participación territorial efectiva de los agentes, administraciones y representantes del sector, en la gestión de los planes pesqueros, que se promuevan y aprueben las necesarias ayudas para la transición a la sostenibilidad, agilizando al máximo su tramitación, así como un uso adecuado de los fondos europeos con el objetivo de establecer una modernización y reestructuración del sector, así como del Fondo de recuperación post COVID 19 Fondos Fempa, agilizando igualmente su tramitación.
Además piden un aumento de la cuota de atún rojo para las embarcaciones artesanales en el próximo reparto sin que vuelvan a favorecer a los lobbys industriles de las grandes empresas atuneras.