La celebración del Día Internacional del Pueblo Gitano inunda de flores la Universidad de Alicante
La ceremonia del Río y la interpretación del himno romaní han protagonizado el acto celebrado este jueves en el campus alicantino
El campus de la Universidad de Alicante se ha teñido del verde y azul de la bandera romaní con motivo de la celebración del Día Internacional del Pueblo Gitano, que se conmemora el 8 de abril en colaboración con las entidades gitanas que forman parte del Consell Valencià del Poble Gitano ( Arakerando, Campus Rom, FAGA y Fundación Secretariado Gitano Arakerando, Campus Rom, FAGA y Fundación Secretariado Gitano) y por primera vez con una asociación gitana universitaria que nace en el seno del campus alicantino denominada “Campus Rom” y el respaldo de la Dirección General de Diversidad de la Generalitat Valenciana y con la participación de la vicerrectora de de Igualdad, Inclusión y Responsabilidad Social, Eva Espinar.
Este acto institucional, que marca el undécimo año de la realización de estos actos, es una manifestación del compromiso de la UA con la inclusión y el reconocimiento de la comunidad gitana.
La conmemoración en la Universidad de Alicante se realizó en la tarde del jueves en la entrada principal, un acto institucional en el que se izó la bandera romaní, se interpretó el himno Gelem Gelem y se realizó la tradicional ceremonia del río en la fuente del Aulario II, una acción en memoria de las víctimas de leyes antigitanas y, especialmente, del Samudaripen o Holocausto Gitano.
La celebración concluyó con el concierto del grupo musical Son d’Alikante, una fusión de flamenco desde una perspectiva interseccional que se realizó en el Museo de la Universidad de Alicante. Estas actividades no sólo conmemoran el Día Internacional del Pueblo Rom, sino que también subrayan la importancia de la visibilidad del estudiantado gitano en el campus universitario.
Jornada para celebrar y reivindicar
El Día Internacional del Pueblo Gitano es un día de homenaje para recordar a sus antepasados, a las víctimas gitanas de la segunda guerra mundial y de otros actos de odio sufridos por el pueblo gitano a lo largo de la historia. Pero además, es un acto de celebración por lo que se ha conseguido y de reivindicación de lo que queda por conseguir en materia de educación por parte de una comunidad que trata de huir de estereotipos y prejuicios.
