La Comisión de Gobierno del Consorcio Terra visita el Centro de Tratamiento de Residuos de Xixona
PreZero va a destinar más de 40 millones de euros para modernizar el complejo ambiental y cumplir con los objetivos de porcentajes de generación total de rechazos, optimizando la valorización de los residuos
Los integrantes de la Comisión de Gobierno del Consorcio Terra visitaron la pasada semana el Centro de Valorización y Eliminación de Residuos Domésticos de Xixona, que explota PreZero como concesionario, con el objetivo de conocer in situ todas las inversiones que se van a acometer y que lo convertirán en uno de los más avanzados del país.
Una visita que contó con la práctica totalidad de los integrantes de la Comisión, con su presidente y alcalde de Agost, Juanjo Castelló, a la cabeza. Además de la presencia de la diputada provincial de Medio Ambiente, Energía y RSU, María Magdalena Martínez; la alcaldesa de Xixona, Isabel López; el director de zona de PreZero en la Comunitat Valenciana y Baleares, Francisco Moro; así como de alcaldes y concejales de los municipios que integran el órgano de Gobierno del Consorcio.
La primera parte de la visita discurrió en el aula ambiental de la planta, donde Juanjo Castelló agradeció la respuesta de todos los representantes por su masiva presencia “porque creemos que es importante que hagamos esta visita, al igual que lo podrán hacer los vecinos, para que conozcamos de primera mano las obras que se van a realizar. Es bueno que caminemos todos juntos”.
También tuvieron la oportunidad de visionar un vídeo explicativo de todas las mejoras en infraestructuras y tecnología que se van a acometer en las instalaciones y que van a permitir recuperar residuos que vienen mezclados, permitiendo su valorización y evitando así que vayan a vertedero. Asimismo, los técnicos del departamento de Ingeniería de PreZero a cargo de la dirección de las obras, que en breve darán comienzo, resolvieron las dudas y cuestiones de los asistentes.
Por su parte, el gerente del Consorcio Terra, Pablo Martínez, explicó que durante el transcurso del proyecto de reforma, en el que PreZero va a invertir más de 40 millones de euros con el objeto de modernizar el complejo ambiental y cumplir con los objetivos de porcentajes de generación total de rechazos, optimizando la valorización de los residuos que llegan a planta, “se va a seguir dando servicio a los municipios”, ya que la actividad de las instalaciones no se va a interrumpir.
Asimismo, se explicó los residuos procedentes de la DANA que han tenido como destino el Centro de Valorización y Eliminación de Xixona, con la llegada hasta la fecha de 190.000 toneladas, en un principio sin tratar por la situación de emergencia y, desde enero, ya comenzando a diferenciar entre rechazo triturado, triturado seleccionado y tierra cribada. A este respecto, Francisco Moro, matizó que la previsión es que los residuos de la DANA lleguen hasta el 15 de mayo y hasta unas 230.000 t en total aproximadamente.
A continuación, la visita prosiguió por las propias instalaciones, deteniéndose en la celda cinco de vertido. Para culminar con un recorrido en un microbús por el resto de la instalación con las pertinentes explicaciones de las nuevas infraestructuras y su futura ubicación.
En este sentido, las inversiones previstas incluyen una nueva nave de compostaje de residuos del contenedor marrón de orgánica selectiva (FORS) y de la poda, una nueva instalación de tratamiento de lixiviados, nuevas celdas de vertedero, la restauración ambiental con el plan de sellado del depósito controlado, una nueva nave de bioestabilización de la Materia Orgánica Recuperada (MOR) de fracción mezcla, una doble báscula de entrada, una nueva pasarela de visitas o el cerramiento de la zona de recepción de residuos de la nave de triaje.
Asimismo, se incorporará tecnología de última generación para la recuperación de residuos, como trómeles y separadores ópticos, al tiempo que será una planta autosuficiente energéticamente, con la instalación de un motor de cogeneración para autoconsumo mediante el aprovechamiento del biogás generado en el vertedero; también con la instalación de paneles solares, lo que permitirá a su vez reducir la huella de carbono.
La duración de la gestión del servicio es de 20 años, a los que hay que sumar la fase en la que se encuentra actualmente de 33 meses para solicitud de licencias y ejecución de las obras.