Vilafamés regula el vertido de purines, lodos y estiércoles en el término municipal
El Pleno aprueba una ordenanza que restringe los derramamientos entre el 1 de junio y el 15 de septiembre, y también los viernes, sábados, festivos y periodos de ferias y fiestas
La normativa establece sanciones que llegan a los 3.000 euros
El Pleno del Ayuntamiento de Vilafamés ha aprobado una ordenanza que regula el vertido de purines, lodos y estiércoles en el término municipal con el objetivo de minimizar el impacto y las molestias que estos residuos causan a la población. La normativa recoge una serie de restricciones entre las cuales destaca la suspensión de los derramamientos en el periodo comprendido entre el 1 de junio y el 15 de septiembre, y también los viernes, sábados, festivos y los días de ferias y fiestas en Vilafamés. Al mismo tiempo, el documento aprobado limita el vertido durante los días de lluvia abundante y en terrenos superiores al 6% de pendiente.
En el caso concreto del vertido de purines durante la época estival, la ordenanza matiza que "con el objetivo de no limitar el funcionamiento de las explotaciones ganaderas" y para que la acumulación no ocasione consecuencias higiénico-sanitarias, "se permite la aplicación de purín en el suelo en las dosis establecidas, una sola vez por semana (los martes) en lugares autorizados por el consistorio". En este sentido, la normativa también regula las distancias a las que se tienen que tirar los residuos y establece que los vertidos quedan prohibidos a menos de 1.000 metros medidos sobre el perímetro del casco urbano y suelo urbanizable; a menos de 300 metros de centros de turismo rural, bodegas para la elaboración de vinos o cavas con oferta enoturística; a menos de 500 metros de conducciones y depósitos de almacenamiento de agua potable o bebederos o balsas para ganado y caza; y a menos de 2.000 metros de pozos y fuentes de abastecimiento a la población.
La nueva ordenanza obligará a los responsables de empresas productoras de purines, lodos, o estiércoles a sacar un permiso municipal para poder acometer la actividad, que sólo se podrá realizar en fincas rústicas con finalidades agrícolas, quedando restringidos los derramamientos en terrenos que no están cultivados y en terrenos forestales.
El alcalde de Vilafamés, Abel Ibáñez, explica que con la aprobación de esta ordenanza "se pretende acabar con el vertido descontrolado de residuos que, ya el año pasado en verano, provocó las quejas de vecinos por las molestias causadas por el mal olor". La normativa también estipula las sanciones que se pondrán a los responsables de los derramamientos, pueden llegar a los 3.000 euros de multa.