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Tradiciones analiza el tejido asociativo para mejorar el funcionamiento y reforzar el trabajo conjunto en defensa del patrimonio cultural de la ciudad

    La Concejalía de Tradiciones ha radiografiado el tejido asociativo vinculado al área que dirige Noelia Samblás, para conocer las principales necesidades y preocupaciones de las entidades con las que colabora de manera habitual el departamento. Con este objetivo, Tradiciones ha elaborado un informe, presentado ya a las asociaciones implicadas, que identifica las principales características, carencias e intereses de las 42 entidades sin ánimo de lucro con las que ha trabajado la Concejalía en los últimos años. Entre las carencias detectadas, destacan la necesidad de digitalización o la mejora de la gestión administrativa.

    “Tenemos un tejido asociativo vinculado al área de Tradiciones de fuerte arraigo e implicación con nuestra ciudad. Y así lo constatan los datos del estudio que hemos elaborado desde el mes de febrero pasado”, señala Samblás, quien destaca el elevado porcentaje de asociaciones religiosas y musicales (64,3%) que conforman este universo asociativo. “De forma         genérica son entidades con muchos años de experiencia que tienen un fuerte arraigo en Vila-real, un compromiso elevado para reivindicar la idiosincrasia de la ciudad, y un deseo permanente de participar en el desarrollo de la sociedad vila-realense”, señala el informe. El actual modelo de gestión asociativa, la eficiencia y la financiación de las actividades, la importancia de los conocimientos en digitalización o en materia jurídica y administrativa son algunas de las conclusiones más relevantes del estudio, que Samblás y la técnica del departamento expusieron a las asociaciones en una reunión celebrada en noviembre en la Biblioteca Universitaria del Conocimiento. El bajo nivel de sinergias entre las asociaciones para la organización conjunta de actividades o el elevado impacto (82,4%) social de las acciones que promueven son otras constataciones de este informe.

    El estudio se inició el pasado mes de febrero, en medio de la pandemia de la covid-19, que afectó la actividad y forma de funcionar de muchas de las asociaciones, al mismo tiempo que paralizó gran parte de su actividad, y cuenta con la participación de todas aquellas entidades con las que la Concejalía ha colaborado los últimos años de la legislatura pasada y la actual. Un total de 42 asociaciones sin ánimo de lucro han apoyado la iniciativa y han aportado información relevante, a través de un cuestionario, sobre el estado del sector asociativo, dejando constancia de las inquietudes y necesidades que tienen como usuarios mayoritarios del área de Tradiciones.

    “En el modelo de alianza con la sociedad que iniciamos hace 10 años, el trabajo con nuestras asociaciones a través de convenios y otras vías de cooperación, es fundamental para nosotros. Vila-real no se podría entender sin nuestras entidades y más en un ámbito como el de Tradiciones, en el cual las asociaciones son depositarias de buena parte del patrimonio cultural material e inmaterial de nuestra ciudad”, explica Samblás, quien recuerda que el capítulo de convenios del Ayuntamiento con entidades se ha multiplicado por cuatro en 10 años hasta llegar a cerca de tres millones de euros en 2021. “Queremos seguir reforzando esta alianza social y queremos seguir trabajando más pero también mejor con nuestros colectivos para construir juntos la nueva Vila-real del siglo XXI. Y es este convencimiento el que nos llevó a iniciar este estudio, a partir del cual podremos implementar nuevas acciones que nos ayuden a dar respuesta a las inquietudes y necesidades del tejido asociativo”, añade.

    “El objeto que, a largo plazo, se pretende es trabajar sobre este tejido asociativo para arraigar las acciones que se generan y canalizar la actividad en beneficio y fomento del patrimonio cultural vila-realense, dado que el carácter representativo de la mayor parte de estos colectivos corresponde a la idiosincrasia, historia, identidad, raíces y particularidades de la ciudad de Vila-real”, concluye Samblás.

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