La falta de acuerdo con tres grandes propietarios del polígono de Miralcamp obliga al Ayuntamiento a renunciar temporalmente al proyecto de mejora subvencionado por el IVACE
El Ayuntamiento de Vila-real se ve obligado a renunciar al proyecto de mejora y modernización del polígono industrial de Miralcamp -cuya ayuda concedió recientemente el Institut Valencià de Competitivitat Empresarial (IVACE)- después de intentar negociar con una docena de propietarios de la zona, que son quienes deben dar el visto bueno para la ejecución de los trabajos que afectan a sus terrenos.
El alcalde, José Benlloch, ha anunciado que se siente “apenado” por esta situación, pero “no hemos podido conseguir un acuerdo unánime, ya que tres de los 12 propietarios no han querido ceder los solares al Ayuntamiento, y justamente son tres dueños que aglutinan entre un 60 y un 70% de la superficie afectada”. Tal y como recuerda, “en 2018 conseguimos ayudas para cuatro polígonos industriales y ayer mismo anunciamos que optábamos a dos más”. “Este proyecto al que nos vemos obligados a renunciar forma parte de uno de los cuatro que nos concedieron anteriormente, ya que en los otros tres sí hemos conseguido llegar a acuerdos, pero en este caso ha sido muy difícil”, indica.
Benlloch señala que “para hacer obras, como por ejemplo alcantarillado, zonas verdes o carriles bici necesitamos expropiar o llegar a acuerdos, pero en este caso ha habido tres propietarios que no han querido llegar a un acuerdo, en algunos casos porque después de ver cómo han actuado otros gobernantes durante muchos años no confían en el Ayuntamiento”. Asimismo, indica que en total la intervención afectaba a unos 15.000 metros de suelo, cuyo coste de expropiación se estima en 1,3 millones de euros.
“En primer lugar, no tenemos dicha suma de dinero, y en segundo, no hay tiempo material, ya que una de las condiciones es que las obras estén acabadas a 31 de diciembre y, en el mejor de los casos, poniéndonos ahora a hacer todos los trámites de cesión de los terrenos, difícilmente llegaríamos a cumplir el plazo, lo que nos traería muchos problemas”, manifiesta, “tenemos que ser realistas, nosotros no podemos hacer lo mismo que hacía el PP, que entraba en los terrenos de forma ilegal”.
“Es una mala noticia para la ciudad, pero también para los propietarios que se han negado, ya que podrían multiplicar el valor de sus solares, que ahora mismo lo tienen muy difícil para darles salida, sin servicios muy necesarios”, afirma el primer edil.
Por este motivo, Benlloch señala que “me duele no poder hacerlo en estos momentos, pero debemos priorizar y centrarnos en los otros tres polígonos en los que sí podemos actuar: Les Voltes, Molí Nou y Carretera d’Onda” y añade que “nuestra obsesión por actuar en la zona de Miralcamp nos llevará a hacerlo, pero más adelante y con calma”, al tiempo que recuerda que fue el actual equipo de gobierno el que puso en marcha un plan de reindustrialización con seis puntos básicos para mantener engrasada la maquinaria durante la época de crisis e impulsar la industria progresivamente durante la recuperación, tal y como está haciendo en la actualidad, gracias a las ayudas de las administraciones. “Cada día seguimos pagando el pasado, pero tenemos proyectos pendientes a los que no renunciamos y vamos a luchar para que sean una realidad”, indica.
Por otro lado, el primer edil se ha mostrado satisfecho después de conocer que Vila-real es, por séptimo mes consecutivo, la ciudad de más de 40.000 habitantes de la Comunitat Valenciana con menor tasa de paro. Además, ha anunciado que acaba de recibir una carta de la Diputación en la que el ente anuncia que se hará cargo de los tratamientos antimosquitos en todas las localidades que lo autoricen. “Es una reivindicación que hemos hecho durante años y ahora reconocen que teníamos razón. Agradezco que se den cuenta, aunque tarde, y por supuesto voy a autorizar los trabajos, aunque igualmente mantendremos el servicio que ya prestábamos a nivel municipal”, concluye.