Beteta aborda las necesidades de centros y familias en una primera reunión de contacto con la coordinadora de AMPA de Vila-real
La nueva concejala de Educación del Ayuntamiento de Vila-real, Aida Beteta, ha mantenido una primera reunión informal con la coordinadora de AMPA de la ciudad para conocer de primera mano las necesidades, sugerencias y problemas de los centros docentes de la ciudad. La entidad agrupa a 19 asociaciones de madres y padres de alumnos de la escuela pública y concertada de la localidad -15 colegios de educación infantil y primaria y 4 institutos de secundaria-, que representan a cerca de 6.000 familias de Vila-real.
La situación de los proyectos de mejora de centros incluidos en el Pla Edificant de la Conselleria de Educación, la construcción del nuevo aulario de Infantil del Carles Sarthou, o la situación del personal de conserjería en algunos de los centros fueron algunos de los temas abordados en esta primera presa de contacto de la nueva regidora. Otras cuestiones planteadas por las AMPA en la reunión son el estado del arbolado de los patios escolares, en particular después de las incidencias climatológicas del curso pasado, que obligaron a eliminar algunos ejemplares, así como la posibilidad de impulsar programas que permitan la utilización de las instalaciones de los centros fuera del horario escolar. La recuperación de la Jornada de convivencia de escuelas y familias, que cerraba el curso escolar en la ermita, y la dotación de mobiliario municipal para las diferentes actividades de las AMPA son otros asuntos trasladados por la Coordinadora, que prevé dotarse de estatutos para formalizar la entidad, después de 10 años de funcionamiento.
“Hemos tomado buena nota de las cuestiones planteadas por las AMPA y estamos trabajando ya para dar respuesta a muchas de ellas, como la mejora de zonas verdes en algún centro o también estudiar la posibilidad de implantar programas piloto de patios abiertos”, señala Beteta. La edil valora la implicación de la Coordinadora en la mejora de la educación en la ciudad. “Son la voz de las familias y su aportación es fundamental para seguir haciendo de Vila-real la Ciudad Educadora que somos”, concluye.