Vecinos de Benimaclet protestarán contra el botellón en el barrio
Vecinos de Benimaclet planean concentrarse para denunciar el botellón que, durante varias noches a la semana, no deja dormir a sus residentes y que genera mucho malestar a quienes lo sufren de manera directa. Orines, griterío, música, suciedad y hasta defecaciones y consumo de estupefacientes son algunas de las quejas que más repiten los ciudadanos de este barrio emblemático del Cap i Casal.
Organizados a través de páginas de Facebook como 'Poble de Benimaclet' o 'Benimaclet Poble', son muchas personas las que han dado su apoyo a la concentración que hay planeada de cara a este viernes día e 13 de octubre, a las 20:15h en la plaza que da nombre a este barrio con sentimiento de pueblo. Según los organizadores, el motivo de la protesta tiene mucho que ver, además de con el botellón en si mismo, con la falta de actuación del Ayuntamiento y la escasez de efectivos policiales.
Precisamente, el pasado mes de septiembre la Policía Local tuvo que desalojar a decenas de jóvenes que, a altas horas de la madrugada, seguían concentrados en las calles del barrio, y en el descampado del colegio público. Las quejas, que ya se cuentan por centenares, no han servido para que se haya encontrado, hasta la fecha, solución alguna.
Cabe destacar que el problema del botellón afecta igualmente a otros barrios de la ciudad, como es el caso del que se organiza con bastante asiduidad en la zona de las salas de fiestas de la Malvarrosa o los pequeños focos alrededor de discotecas en la Gran Vía. Asimismo, Ruzafa o el Carmen denuncian también problemas de convivencia relacionados con la fiesta en la calle y el ruido a altas horas de la madrugada. En este sentido, el ya casi histórico problema del botellón, se ha resuelto con éxito en zonas como Tarongers, donde hace ya más de cinco años se acabó con las macroconcentraciones de estudiantes que cada jueves bebían en los alrededores de los aularios de la Universitat de València. Ahora, en la mencionada zona, se vuelve a poner encima de la mesa la posibilidad de instalar una valla que cerque y acabe con esta problemática ante posibles reapariciones del fenómeno nocturno.
Denuncias políticas
Contra la situación no sólo han protestado los vecinos, aunque han sido éstos, por ser los directamente afectados, quienes siempre han llevado la batuta de las quejas. Partidos políticos como el PP de la ciudad de Valencia han acusado al gobierno de Ribó de dejadez de funciones y de imponer pocas multas en el caso de Benimaclet. Los populares llevan tiempo denunciando, a través de varios medios, los botellones que se organizan en varios puntos de la ciudad. También el partido valencianista Demòcrates Valencians emitió recientemente un comunicado en el que se pedía mayor presencia policial en Benimaclet para acabar con estas prácticas incívicas.
Propuesta del Ayuntamiento
Para acabar con el temido botellón, la concejala de seguridad ciudadana, la socialista Anaïs Menguzzato, tiene previsto elaborar una nueva ordenanza que permita multar a quienes molesten en las calles en este tipo de fiestas no autorizadas aunque no estén necesariamente bebiendo alcohol. Menguzzato, que apostó por una solución 'transformadora' a largo plazo, aseguró que haría falta muchos agentes cada noche para controlar todas las plazas, y apostó por modificar la normativa para, a través de las denuncias, acabar con este lastre.
