Sanjuan denuncia que con Catalá hay 165 apartamentos turísticos nuevos cada mes
Los socialistas recuerdan que Carlos Mazón ha “amnistiado a los apartamentos registrados antes de 2018 de que no cumplan con la normativa municipal al eximirlos de renovar la licencia cada cinco años
El portavoz del Grupo Municipal Socialista, Borja Sanjuan, ha denunciado que con María José Catalá hay de media 165 apartamentos turísticos nuevos cada mes en València, de acuerdo con la información que facilita Visit València y los datos abiertos de la Generalitat Valenciana.
De acuerdo con estos datos, Sanjuan ha explicado que desde el año 2019, donde empezaron a aplicarse medidas restrictivas por parte del gobierno progresista a los apartamentos turísticos en València, y hasta mayo de 2023, “cada año se redujeron una media de 8,66 apartamentos turísticos cada mes”. “Una situación que cambia drásticamente con Catalá en la Alcaldía cuando empiezan a aumentar 165,81 mensualmente de media desde mayo de 2023 hasta la actualidad”, ha detallado.
A este respecto, el concejal socialista ha explicado que “no hay más que consultar los datos oficiales para desmotar las mentiras de María José Catalá y ver cómo con la llegada de la derecha al gobierno se ha producido un efecto llamada para los especuladores”.
Tras la aplicación del cambio normativo en 2018 que obligó a presentar un informe de compatibilidad urbanístico para poder registrar un apartamento turístico en la ciudad, no solo se frenó drásticamente el número de registros, sino que el número total de apartamentos registrados se fue reduciendo cada año, “hasta la llegada del Partido Popular al gobierno, que hizo que los registros volviesen a aumentar más de un 10% en poco más de un año. Por no hablar de los ilegales, que desde mayo de 2023 hay 2.079 apartamentos ilegales más en la ciudad” concluye el portavoz.
Sanjuán ha recordado que María José Catalá “guardó la moratoria en cajón permitiendo que los apartamentos se dispararan sin tomar ninguna medida y dio barra libre a los especuladores logrando que se disparara el número de apartamentos turísticos en la ciudad, llegando hasta los actuales 11.310 apartamentos turísticos, que han dejado de ser viviendas o comercios de proximidad”. En esta línea, la ha responsabilizado de “generar un problema insostenible para los vecinos y vecinas de València” porque “ha generado un efecto llamada y ha dejado que Airbnb sea más protagonista que el gobierno municipal en la toma de decisiones”.
Por otra parte, ha advertido de que Carlos Mazón ha “amnistiado a los apartamentos registrados antes de 2018 que no cumplen con la normativa municipal al eximirlos de renovar la licencia cada cinco años, tal y como se obliga al resto de propietarios de este tipo de alojamiento en el nuevo decreto del Consell. “Antes de ese año no se exigía el certificado de compatibilidad urbanística para poder registrarse en la Generalitat Valenciana, por lo que muchos son ilegales desde el punto de vista urbanístico. Por eso, si se les aplicara la obligación de renovar la licencia, la perderían”, ha afirmado.