La predela del Centenar de la Ploma llega a València para ser estudiada y restaurada por Cultura
La predela del retablo de San Jorge del Centenar de la Ploma, una de las obras más representativas del gótico internacional valenciano, ha llegado a València, donde será restaurada por el Instituto Valenciano de Conservación Restauración e Investigación, dependiente de Cultura de la Generalitat.
El pasado mes de diciembre el president de la Generalitat, Ximo Puig, acompañado por el conseller de Cultura, Vicent Marzà, firmó un acuerdo con el director del Victoria and Albert Museum de Londres, Tristan Hunt, donde se conserva el retablo actualmente, por el cual se realizaba el préstamo de la predela para que el IVCR+i llevara a cabo una investigación técnica en profundidad así como la restauración de la pieza.
La predela se encuentra dividida en dos paneles de 191 x 56 y 193 x 56 cm que han sido depositados en el departamento de restauración del Museo de Bellas Artes de València. Durante 15 meses aproximadamente se realizarán inicialmente los estudios previos en los que se analizarán en profundidad los materiales empleados en la elaboración de la predela y el estado de conservación. Para ello se empleará una metodología mínimamente invasiva que incluirá, entre otras, la fotografía visible y ultravioleta de alta resolución, la reflectografía infrarroja, la radiografía digital y la tomografía computarizada.
Una vez obtenidos los resultados se iniciará el proceso de restauración por personal del IVCR+i especialmente diseñado teniendo en cuenta las características propias de la obra, de modo que se lleve a cabo el proceso con las máximas garantías.
Por último, se realizará una exposición de la obra, en la que se mostrará la última fase de restauración en la sala de los retablos del museo. En la predela se representan diez escenas de la Pasión de Cristo.
El proceso de intervención de restauración de la predela se llevará a cabo con una serie de tratamientos, para, de esta manera, devolver a la obra un estado de conservación adecuado.
Dichos tratamientos se centrarán en la consolidación y fijación de aquellas estructuras debilitadas o susceptibles de desprendimiento, tanto en la pintura como en el dorado: estudio, limpieza y estabilización del soporte y estudios y ensayos de limpieza sobre la superficie pictórica y dorada, para la retirada de suciedad, repintes y barnices oxidados o no originales.
Una vez valorados los ensayos de limpieza se determinarà un protocolo para llevar a cabo dicha fase de limpieza, estucado de pérdidas y reintegración cromática. Como fase final de intervención se aplicará un barniz de protección.
Además de la restauración de la predela, el IVCR+i está analizando el conjunto del retablo de San Jorge dentro de un proyecto de investigación, en colaboración con la Universitat de València y la Universidad Complutense de Madrid, cuyo objetivo es establecer un estudio comparativo de pintores del gótico internacional que desarrollaron su actividad en València en esa época, a través de los materiales y técnicas empleados.
El proyecto persigue elaborar un patrón de identificación de materiales y técnicas de los artistas valencianos que los historiadores expertos consideran que participaron en la confección del retablo: Miquel Alcanyís y Marçal de Sax, a partir de otros retablos valencianos de su indiscutible autoría.
Es una tarea de investigación multidisciplinar que comprende tres aspectos: la historia del objeto y el estudio histórico estilístico (historiadores) y el estudio material (restauradores y científicos del arte).
Centenar de la Ploma
El Centenar de la Ploma, atribuido a Miquel Alcanyís y Marçal de Sax, y pintado a inicios del siglo XV, estaba situado en la desaparecida iglesia de Sant Jordi de València. Este retablo es un referente fundamental del gótico valenciano y representa en una de sus escenas principales la batalla del Puig, que abrió las puertas a la conquista de València en 1238.
El retablo debe su nombre a la milicia urbana creada en 1365 por Pedro IV el Ceremonioso, que era conocida como el Centenar de la Ploma porque el centenar de ballesteros encargados de la salvaguarda de la ciudad de València iban vestidos de hábito blanco con una cruz de San Jorge y ornamentaban su cabeza con una pluma de garza.
El retablo del Centenar de la Ploma tiene unas dimensiones de 6,60 por 5,50 metros. Está formado por cinco calles. La central expone la lucha de San Jorge contra el dragón ante la princesa; arriba, la batalla del Puig de 1237 y en la cimera, la coronación de la Virgen y Cristo sentado en majestad dominando la composición del conjunto. En las calles laterales se sitúan dieciséis escenas alusivas a la leyenda de San Jorge, coronadas por las cuatro figuras de los evangelistas. En las entrecalles se disponen veinticuatro profetas, la mayoría identificados por una cartela; y en el guardapolvo, los doce apóstoles, alternados con el emblema de la cruz de San Jorge y una ballesta. Finalmente, en la predela se representan diez escenas de la Pasión de Cristo, a falta de una parte central desaparecida.