La Policía Local adquiere 10 pistolas inmovilizadoras
La Policía Local de Valencia ha adquirido 10 inmovilizadores eléctricos TASER y ha formado a un centenar de agentes de todas las unidades de distrito de la ciudad y todos los turnos para garantizar que estas armas estén disponibles y operativas las 24 horas del día en cualquier distrito de la ciudad. Estas armas se utilizarán en aquellas situaciones en las que exista un grave riesgo para la integridad física de personas, policías o sujetos a controlar.
Se trata de unas armas de fuerza no letal que permiten la incapacitación de una persona mediante pulsos eléctricos que interfieren entre el sistema nervioso central y el sistema motor, sin provocar lesiones ni daños graves en el organismo y sin efectos secundarios. Disponen de unas cámaras cuya grabación se activa en el mismo instante en que el agente quita el seguro. Las grabaciones de las intervenciones se remitirán a la autoridad judicial competente en el caso de que sean requeridas, sino se destruirán en el plazo de un mes.
"Son un modelo de pistola que sólo se empleará en situaciones críticas cuando sea absolutamente necesario contar con un arma no letal cómo en casos de violencia de género para disuadir al agresor" ha indicado la concejala de Protección Ciudadana, Anaïs Menguzzato que ha añadido que estas situaciones son "afortunadamente excepcionales en Valencia pero consideramos que debíamos contar con estas armas para aumentar la seguridad". Además, según ha explicado Menguzzato, al contar con una cámara, "son unas armas garantistas" con los derechos y deberes de agentes y ciudadanos.
En la actualidad, las policías de 107 países cuentan con esta arma cuyo uso está previsto para todas aquellas situaciones en las que pueda ser posible el uso de la fuerza o en el que se informe a la Sala del 092 de una agresión o de sujetos que porten armas blancas o de impacto. En el 84 % de los casos disuade al agresor. El presupuesto total de esta adquisición asciende a 50.000 euros.