La parroquia de San Agustín arranca los trabajos de reparación de su órgano, único en Valencia

Valencia cuenta con auténticos tesoros, joyas de la cultura y de la historia que podemos descubrir si miramos un poco más allá. En la emblemática iglesia parroquial de Santa Catalina y San Agustín de Valencia (s. XIII) encontramos uno de esos tesoros que todos deberíamos conocer: un hermoso órgano de estilo alemán de grandes dimensiones que está ahora pasando por un proceso de compleja reparación para limpiar, afinar y reparar los desperfectos del paso del tiempo.

Como curiosidad y para comprender la magnitud de la restauración, este órgano del año 2002 cuenta, ni más ni menos, con unos 2.300 tubos aproximadamente. Hace unos años, durante la restauración de una bóveda, una gota fría mojó parte del órgano, lo que causó importantes daños. Esto, sumado al paso del tiempo, al polvo y a la humedad, hacen necesaria una intervención profunda, nos explica Olivia Desmottes, organera y responsable de la reparación.

“Vamos a estar tres semanas trabajando porque hay que desmontar el órgano, sacar todos los tubos del pedal, limpiarlos, quitarles el polvo y reparar lo roto. Por ejemplo, en el caso de los portavientos (unos plomos que llevan el viento del secreto al tubo) han explotado con la humedad y hay que cambiarlos”. Esto último es importante puesto que afecta al sonido.

El Taller de organería Frédéric·Desmottes fue quien montó este hermoso órgano hace ahora veinte años y es quien está al cargo de la reparación. Natural de Landete (Cuenca) esta empresa es referente en el sector de los órganos y cuenta con destacados trabajos por España, Europa e incluso en Brasil.

A principios de octubre se calcula que el órgano pueda estar listo tras una reparación que ha sido realizada gracias a una donación. Será entonces cuando esté todo listo para un esperado reestreno: “Tenemos muchas ganas de ver cómo suena”, dice entusiasmado Juan Montesinos, organista de San Agustín. Él, de hecho, lleva desde el primer día tocando este órgano, ni más ni menos que veinte años haciendo sonar los acordes todos los fines de semana en la parroquia.

El órgano de San Agustín es de los trabajos más especiales que podemos encontrar y, de hecho, es único en Valencia: “Tiene un estilo alemán, lo que le permite tocar un repertorio muy amplio y está diseñado para, en una siguiente fase, seguir ampliándolo”, nos explica Olivia Desmottes.

“Hemos de cuidar el patrimonio y este órgano es una pieza única, pensada para la Parroquia”, explica Don Javier Llopis, párroco de San Agustín.