El nuevo Centro Municipal de Servicios Sociales de la Saïdia empezará a atender al público la semana que viene

La concejala de Servicios Sociales, Consol Castillo, ha visitado esta mañana el nuevo Centro Municipal de Servicios Sociales, situado en el barrio de la Saïdia, con el que se amplía el número de centros a doce en la ciudad de València. Asimismo, el personal municipal comenzará la semana que viene la atención al público. Concretamente está situado en la calle Sarrión, en la esquina con la avenida de Portugal; y la apertura llega después de que el Consistorio haya realizado una serie de obras durante dos meses y medio en el local, para dejarlo plenamente dispuesto para la tarea de atención al público.

Castillo ha explicado que «el equipo de Servicios Sociales de Saïdia ya está preparándose para el lunes empezar a trabajar con los usuarios, hemos hecho una visita para ver que está todo cogiendo forma y estamos muy satisfechos, ya que será un centro que atenderá a una población de aproximadamente 40.000 usuarios, y que descongestionará el Centro de Salvador Allende y en parte el de Campanar».

Respecto al personal que atenderá el nuevo centro, habrá un total de 15 trabajadores y trabajadoras, entre profesionales de trabajo social y auxiliares. Concretamente su zona de actuación comprenderá los barrios de Les Tendetes y El Calvari, ahora objeto del centro de Campanar, y las de Marxalenes, Morvedre, Tormos y Sant Antoni, correspondiente al centro de Salvador Allende.

La concejala ha destacado que «este es el nuevo modelo con el que tiene que trabajar la ciudad de València, centros de un nivel de población asequible donde la atención sea más fácil, próxima y personalizada». «Continuaremos trabajando para incrementar el número de Centros Municipales de Servicios Sociales de la ciudad de València», ha añadido.

En cuanto a los centros en los que se está trabajando actualmente, Castillo ha expuesto que «se prevé que en poco tiempo se inaugurará el centro del Cabanyal. También estamos con el proyecto del nuevo Centro de Benicalap, sobre el que estamos trabajando en los planos, y que descongestionaría al Centro de Campanar, que en estos momentos se quedará con una atención a la población más elevada».

CONVENIO CON LA ASOCIACIÓN HOGARES COMPARTIDOS

Durante su visita, la concejala de Bienestar Social, Consol Castillo, ha informado sobre el convenio firmado entre el Ayuntamiento y la Asociación Hogares Compartidos para el desarrollo de un proyecto de convivencia dirigido a las personas mayores de la ciudad. Se trata de una iniciativa de «vivienda compartida», que prevé que las personas beneficiarias establezcan relaciones de convivencia y apoyo reciproco, de manera que puedan mantener su autonomía personal y su entorno, y evitar su ingreso en instituciones. El proyecto se basa en el concepto de 'envejecimiento activo'.

Mediante este acuerdo, la Asociación Hogares Compartidos se compromete a organizar la puesta en marcha y gestión económica de los hogares, así como realizar la selección de las personas residentes. Asimismo, deberá ofrecer información y orientación sobre las actividades relacionadas con el envejecimiento activo, realizar un seguimiento de cada uno de los hogares, y tramitar las autorizaciones y licencias necesarias para la puesta en marcha de la actividad.

Por su parte, el Ayuntamiento se compromete a disponer de viviendas para su uso como hogares compartidos. Y, demás, específicamente a través de los Centros Municipales de Servicios Sociales (CMSS) de la Concejalía de Bienestar Social e Integración deberá informar y orientar a las personas mayores (tarea que incluye la detección y derivación de las personas interesadas), y tramitar los recursos sociales que correspondan a las personas alojadas.

Tal como establece el convenio, se constituirá una comisión de seguimiento con representantes designados por ambas partes en régimen de paridad, que se reunirá con carácter semestral, bajo la presidencia de la concejala de Servicios Sociales, Consol Castillo. El acuerdo tendrá una vigencia de dos años, prorrogables hasta un máximo de dos años más