Llegan las lluvias a València: ¿Tendremos una Crida pasada por agua?
Son muchos los falleros que ya miran al cielo con recelo, las previsiones para este fin de semana recomiendan llevar el paraguas a mano
La lluvia amenaza de nuevo con empañar la primera jornada de Fallas. Con la cuenta atrás puesta en marcha para celebrar este domingo la Crida, son muchos los falleros que ya miran al cielo con recelo esperando que el 26 de febrero el tiempo acompañe en el pistoletazo de salida oficial de las Fallas 2023.
Desde Meteored señalan que tendremos un cambio de tiempo muy importante en los próximos días, y que notaremos especialmente durante la segunda mitad de la semana. Si se cumplen algunos escenarios, estamos a las puertas de un nuevo episodio de inestabilidad bastante potente.
Durante la recta final de la semana la situación podría inestabilizarse aún más: el embolsamiento de aire frío en altura tenderá a desplazarse hacia el Mediterráneo, donde probablemente se formará una borrasca en superficie, aunque de momento los modelos no se ponen de acuerdo en mostrar dónde lo hará.
Por su parte, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) estima en un 30% la probabilidad de chubascos este domingo, aunque este porcentaje podría variar a lo largo de la semana. Lo que parece claro es que durante los próximos días tendremos que ir acompañados del paraguas y el día de la Crida no será una excepción.
En cuanto a las temperaturas, los termómetros rondarán entre los 7ºC de mínima y unos 15ºC de máxima. Un tiempo invernal que por el momento, no adelanta la llegada de la primavera por Fallas.
Las Fallas de 2022 fueron las más lluviosas desde hace mucho tiempo
Si hablamos de lluvias y tiempo inestable no podemos dejar de recordar las Fallas del 2022, donde las precipitaciones y el viento fueron los protagonistas durante prácticamente todas las fiestas. Tanto, que algunas mascletaes se tuvieron que suspender debido a la climatología.
Además, muchos de los monumentos se mojaron y sufrieron algún que otro desperfecto a consecuencia de la lluvia y las fuertes rachas de viento.
Pero sin duda, no nos olvidamos de una Ofrenda pasada por agua que hizo que los falleros pusieran todo su empeño en llevar su ramo a la Mare de Déu, pues la lluvia no fue ningún impedimento para que miles de personas desfilaran por la plaza de la Virgen para entregar su ramo y confeccionar el manto de la Virgen de los Desamparados.
