L’ETNO presenta el libro ‘Vidas minadas, 25 años’ del fotógrafo Gervasio Sánchez
En la publicación, de la editorial BLUME, el autor vuelve a visitar a las víctimas de las minas de diferentes conflictos que fotografió hace más de 25 años
L’ETNO, Museu Valencià d’Etnologia, ha presentado el libro ‘Vidas minadas, 25 años’, de Gervasio Sánchez, con fotografías que simbolizan la tragedia que afecta a centenares de miles de víctimas de explosiones de minas antipersona en todo el mundo.
La publicación, que es el catálogo de una exposición que el museo de la Diputació de València exhibirá en 2024, fue presentada por el director de L’ETNO, Joan Seguí, y el fotógrafo Gervasio Sánchez.
Gervasio Sánchez, fotógrafo y periodista cordobés afincado en Zaragoza, ha ejercido como periodista independiente para diferentes diarios y revistas, especializándose en conflictos armados, y lleva trabajando desde 1995 con víctimas de minas antipersona. En 1997 empezó el proyecto ‘Vidas Minadas’, y durante estos años ha mantenido un contacto muy estrecho con las víctimas, y ha podido conocer y fotografiar la historia vital de unas personas a las que una mina de forma aleatoria les truncó la vida para siempre.
Las víctimas de este proyecto fueron elegidas al azar en países africanos como Angola y Mozambique, asiáticos como Camboya, Afganistán e Irak, latinoamericanos como El Salvador, Nicaragua y Colombia o europeos como Bosnia-Herzegovina. Son imágenes de personas en hospitales a las que se les va amputar un miembro debido a una mina; fotografías de centros ortopédicos donde las víctimas intentaban volver a caminar con piernas de plástico, y fundaciones o familias que sobrevivían con muchas dificultades. Además, el libro muestra fotografías que muestran la evolución que estas personas han vivido a lo largo de estas dos décadas, cómo han cambiado sus vidas y la de sus familias durante este periodo, un tiempo en el que han tenido que convivir con la huella de una tragedia sufrida hace un cuarto de siglo.
En 1995 Gervasio Sánchez llevaba más de una década fotografiando la violencia más descarnada en distintos continentes. Sabía lo que era una mina porque las había evitado en El Salvador o Nicaragua mientras se desplazaba con los combatientes durante los enfrentamientos, o en los conflictos balcánicos cuando revisaba cualquier edificio destruido antes de entrar en él por miedo a encontrar una mina trampa.
Lo que el fotógrafo desconocía es que las minas causan mayor dolor cuando el conflicto ha finalizado y los refugiados regresan a sus domicilios después de años de ausencia. Los ejércitos gubernamentales o los grupos irregulares como guerrillas, paramilitares o mercenarios casi siempre se olvidan de desactivar las minas que han sembrado en los mismos campos que los campesinos tienen que utilizar para cosechar. No queda otro remedio que asumir el riesgo: plantar para comer o morir de hambre. Las minas siempre están esperando a su siguiente víctima. Durante años y décadas son mortíferamente fértiles.
Las víctimas protagonistas de este proyecto documental simbolizan la tragedia que afecta a centenares de miles de víctimas de explosiones de minas antipersona en todo el mundo, todas con una historia que contar de lucha por la supervivencia y la dignidad.
‘Vidas minadas, 25 años’ es un grito contra una terrible injusticia y un drama diario. Muestra cómo afectan a los protagonistas las heridas físicas que se mantienen en los cuerpos talados para siempre; también refleja las ocasiones que hay que cambiar de prótesis, el coste de las múltiples operaciones, los efectos psicológicos que destruyen tanto o más que las mutilaciones, el dolor por las dificultades existentes para mejorar, y la felicidad por los pequeños retos conseguidos.
Gervasio Sánchez (Córdoba 1959), es periodista licenciado en la Universidad Autónoma de Barcelona y ha trabajado como periodista independiente para diferentes diarios y revistas, especializándose en conflictos armados. Desde 1984 hasta 1992 cubrió la mayor parte de los conflictos armados de Latinoamérica. Ha trabajado como enviado especial del periódico Heraldo de Aragón, medio con el que mantiene estrecha relación desde 1987, tanto en la guerra del Golfo de 1991 como en los distintos conflictos armados en la antigua Yugoslavia, África, Asia y Latinoamérica. También colabora con la Cadena Ser desde agosto de 1994.