L’ETNO. Museu Valencià d’Etnologia renueva su dirección
Después de la reciente jubilación de Francesc Tamarit, el museo de la Diputació de València dedicado a la cultura popular y tradicional valenciana escoge a Joan Seguí, que ya dirigió el museo entre los años 2008 y 2014
Joan Seguí, director de l’ETNO. Museu Valencià d’Etnologia entre los años 2008 y 2014, ha sido escogido como nuevo director de este museo propiedad de la Diputació de València, tras la jubilación del anterior director, Francesc Tamarit, que ha ocupado el cargo desde el año 2015.
La nueva etapa del museo se encara desde una situación institucional consolidada, con una nueva y reciente exposición permanente denominada ‘No es fácil ser valenciano o valenciana’, y con la nominación de L’ETNO a los premios EMYA a mejor museo europeo del año. En palabras de Seguí, “el hecho de estar nominados demuestra con creces el trabajo hecho por Francesc Tamarit y su equipo los últimos años. Querría que ese trabajo fuera el punto de partida de esta nueva etapa de L’ETNO”.
El proyecto que plantea Joan Seguí parte de una visión que tiene dos vertientes. Por un lado, la que vincula a L’ETNO con el objetivo de conservar, investigar y difundir el patrimonio etnográfico valenciano, tanto material como inmaterial. Por otro, el objetivo de trabajar con ese patrimonio para ofrecer reflexiones que tengan uno óptica universal. La idea es continuar trabajando para que L’ETNO, desde la cultura popular valenciana, sea un museo capaz de proponer temáticas que, más allá de conectar con “la actualidad”, puedan ser reconocidas por un abanico amplio de públicos, sean locales o foráneos.
En la línea de renovación que están desarrollando otras instituciones museísticas, la propuesta de la nueva dirección es insistir en el papel del museo como un agente de acción social. Un agente que trabaja desde los postulados teóricos de la antropología, la disciplina que le es propia al museo, para construir discursos atractivos y útiles para un público lo más amplio posible.
Así las cosas, el trabajo con las memorias conflictivas, la implicación en la recuperación y el conocimiento de los saberes tradicionales y su relectura desde postulados de sostenibilidad contemporáneos, la acción del museo como agente y espacio donde las personas pueden encontrar ocio y hacer diálogo, pero también acogida e incluso bien estar, son algunas de las vertientes de acción que se plantea incentivar.
Asimismo, dos pilares esenciales de l’ETNO, como son la colección y el territorio, están igualmente presentes en el proyecto que quiere impulsar la nueva dirección. La colección en cuanto que es la más importante de su tipología en tierras valencianas. Un conjunto muy representativo de las formas de vida y la visión del mundo de la sociedad valenciana, y que es necesario continuar investigando y difundiendo. Resulta clave en esta nueva etapa la voluntad de trabajar para hacerla accesible, no solo a los investigadores, sino también a la ciudadanía, dado que su tipología -a menudo muy fácil de reconocer- facilita el diálogo y el intercambio de experiencias y conocimientos entre los profesionales del museo y el público.
El territorio en cuanto que la vinculación institucional del museo con la Diputació afianza su trabajo con los pueblos. En este sentido, el éxito conseguido por la Red de Museos Etnológicos (ETNOXARXA) los últimos años (con casi 30 museos de la provincia adscritos), representa una base sólida sobre la que construir nuevas dinámicas de colaboración que tienen que incluir necesariamente el fortalecimiento del trabajo técnico en red y la creación de nuevas herramientas compartidas de gestión y difusión de las colecciones.