Joan Ribó marca con la Federación de Vecinos las líneas de trabajo “para consolidar el modelo de ciudad amable e inclusiva”
El alcalde fija como retos el fomento de la vivienda, la limpieza y la creación de empleo en la ciudad
El alcalde de València, Joan Ribó, ha recibido esta mañana una delegación de la Federación de Vecinos de València, con quien ha dialogado sobre los retos de la ciudad y las acciones de gobierno que se están implementando o que se pondrán próximamente en marcha “para mejorar la vida en la ciudad, y consolidar el modelo de una València amable e inclusiva”.
Joan Ribó ha explicado a los representantes de la entidad vecinal cómo mejorará la accesibilidad al centro histórico de la ciudad con los procesos de peatonalización de las plazas de la Reina, del entorno Mercat-Bruges y del Ayuntamiento. El alcalde ha recordado que en estos procesos se establecen unas líneas de participación ciudadana que en el caso de la plaza de la Reina han durado meses, y que también se impulsarán con la reurbanización de la plaza del Ayuntamiento. “Nuestra voluntad es que estas plazas lo sean de verdad: que el acceso de peatones y del transporte público sea una prioridad, respetando el acceso a los garajes existentes”.
Ribó, de hecho, ha explicitado ante la Federación el orden de prioridades en cuanto a la movilidad, encabezado, en primer lugar, por el caminar, que es la manera como más se mueve la ciudadanía en València. En segundo lugar, el transporte público y los sistemas de movilidad personal no contaminantes, y los vehículos a motor privados. En este sentido, el alcalde ha remarcado que “las bicicletas y patinetes tienen que ir por sus propios carriles o por la calzada cuando hace falta, pero nunca por las aceras”, tal y como dicta la ordenanza de movilidad. Por eso se ha incrementado la vigilancia y la política de información y sanciones.
Además, el alcalde ha coincidido con los representantes vecinales en la necesidad “de una mayor concreción en la toma de medidas por parte de la Autoridad Metropolitana de Transporte, que tiene que avanzar en la integración de títulos de viaje como el bus, metro y trenes de cercanías, así como en la puesta en marcha de un plan de movilidad metropolitana con servicios públicos”. Las reivindicaciones conjuntas del alcalde y el movimiento vecinal no han acabado en este punto. Así, Joan Ribó ha explicado que ya ha trasladado a la Delegación del Gobierno la necesidad de una acción “contundente” para que la Policía Nacional pueda poner fin al tráfico de drogas, sobre todo en determinados barrios. Y también ha emplazado “a ordenar una de las principales fuentes de riqueza que tenemos, como es el turismo. València ya ha empezado a hacerlo, pero necesitamos la colaboración otras administraciones: para poner en funcionamiento una tasa simbólica a los turistas que ayude a financiar los servicios públicos que utilizan, como por ejemplo la limpieza o la seguridad, y a limitar los apartamentos turísticos que se están convirtiendo en un problema importante en barrios como Ciutat Vella y Russafa. Nuestros barrios no son parques temáticos para turistas, sino que en ellos tiene que poder vivir el propio vecindario sin que, por ejemplo, se le suba el precio del alquiler de manera desorbitada”.
Así, Joan Ribó ha explicado a la Federación de Asociaciones de Vecinos que la vivienda es uno de los principales retos de la ciudad, y ha avanzado que “así se verá en la implementación de recursos económicos”. Lo mismo, ha dicho, “ocurre con la jardinería y la limpieza. La Federación de Vecinos coincide con nosotros en el esfuerzo que ya se ha hecho para mejorar la limpieza y hacer más zonas verdes en la ciudad, y el reto está en mejorarlo todavía más, día a día”.
Finalmente, el alcalde ha explicado los métodos que se están implementando para fomentar la participación ciudadana, como por ejemplo con buzones físicos, ubicados en centros municipales, además de la recepción de ideas on line, o a través del registro municipal, de las redes sociales institucionales y del servicio de Quejas y Sugerencias. Y ha destacado que los presupuestos participativos continúan adelante y “son una de las herramientas de participación más aplaudidas desde que se pusieron en marcha a principios del mandato anterior, así como otras medidas innovadoras como el bando fallero participado”.
Ante la preocupación vecinal a raíz de la ampliación norte del Puerto, el alcalde ha mostrado su posicionamiento, basado en la necesidad de elaborar una Declaración de Impacto Ambiental por la modificación del proyecto original de 2007, y la posible afección a los barrios marítimos, además del paisaje y el medio ambiente. Finalmente, la apuesta “firme” por los accesos ferroviarios a la ciudad es una de las líneas explicadas por Joan Ribó. El alcalde ha evidenciado “el trabajo de una administración municipal como la de València, que tiene que coordinar los servicios para las 800.000 personas que viven en la ciudad, pero también para las decenas de miles que vienen cada día a estudiar, a trabajar o a disfrutar de las opciones de València”. En este sentido, ha agradecido la confianza hacia el Ayuntamiento expresada por la Federación de Vecinos “y la tarea que hace esta entidad a la hora de coordinar los diferentes intereses de las asociaciones que la integran”.