La investigación concluye que el edificio del incendio de Campanar se podrá rehabilitar
El informe desvela que la estructura no fue dañada por el brutal fuego
Tras tres meses y medio de incertidumbre desde que tuvo lugar el incendio que arrasó dos bloques del edificio de Campanar, hoy por fin los vecinos empiezan a ver la luz al final de túnel tras darse a conocer que el edificio podrá rehabilitarse.
Las 130 familias que se quedaron sin un hogar el pasado 22 de febrero, podrán recuperar su rutina en el barrio donde ya tenían una vida construida. La noticia ha supuesto una gran alivio para los vecinos, puesto que la gran mayoría han tenido que empezar su vida lejos de barrio, alejándose así de los colegios de sus hijos y sus trabajos.
En este sentido, a los dos meses del incendio, los vecinos se unieron bajo las siglas Aproicam (Asociación de Propietarios Afectados Incendio Campanar), con el objetivo de reconstruir sus hogares en el barrio, y hoy finalmente su lucha y trabajo se ha visto recompensada.
Según ha podido saber elperiodic.com, la investigación particular realizada para conocer el estado del edificio ha podido concluir que el edificio no sufre daños estructurales de relevancia.
El informe indica que “el fuego ha afectado de forma general a todas las plantas de viviendas del edificio, por encima de la planta segunda”. Sin embargo, “dicha afectación ha sido en cambio muy limitada desde un punto de vista estructural”.
Y es que, según se desprende de este peritaje, el fuego se extendió con “una ventilación muy significativa haciendo que, aunque se alcanzaran temperaturas muy elevadas rápidamente, la duración del fuego fuera relativamente reducida”
Además, la existencia de falsos techos y aplacados de cartón-yeso en torno a los soportes, retrasó la exposición al fuego de muchos elementos estructurales.
Por otro parte, también se indica que los pilares no presentan daños, más allá de algunos problemas superficiales, por lo que consideran que únicamente hará falta “una limpieza superficial por motivos cosméticos”.
Los forjados, por su parte, tampoco presentarían daños importantes, aunque en las zonas de los ábacos (las áreas de hormigón armado junto a los pilares), sí se han producido desprendimientos que deberán de repararse y sanearse.
En cuanto a las vigas, estiman que “únicamente en algunas vigas (fundamentalmente de las plantas superiores), sería recomendable una reparación superficial, al tiempo que, en ciertos nervios (elementos de hormigón del forjado reticular), será necesaria su reconstrucción”.
Cabe recordar que el incendio se originó el 22 de febrero sobre las 17:30 horas en el apartamento 86 de uno de los dos edificios conformados por 138 inmuebles que fueron devorados por las llamas, en apenas una hora. El incendio dejó sin vivienda a 450 personas, diez fallecieron y otros 15 resultaron heridas, entre ellas seis bomberos.
