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Galiana (Compromís): “Este gobierno se caracteriza por no gastarse lo que no tiene”

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    Carlos Galiana es el concejal número nueve en la lista de Compromís, justo el número de ediles que obtuvo el partido en las pasadas elecciones municipales. El concejal, que ocupa la importante cartera de comercio, así como la de espacio público, control administrativo o la de relaciones con los medios, presume de haber acertado la apuesta que en su día hizo con el alcalde Joan Ribó sobre cuántos ediles obtendría Compromís. Finalmente, los deseos de Galiana y de Ribó se vieron cumplidos el pasado mes de mayo de 2015, convirtiéndose Compromís en la primera fuerza de la oposición, muy cerca del Partido Popular (PP) y siendo ésta la formación que encabeza el actual gobierno del Ayuntamiento de Valencia nacido del Pacto de la Nau, y que cambió el color político de la ciudad veinticuatro años después de que Rita Barberá llegase al poder.

    Carlos Galiana, procedente del mundo de las artes, pues es licenciado en Arte Dramático, y ha actuado y dirigido en varias ocasiones, confiesa que se involucró en política en 2012 tras la difícil situación social, y la también complicada situación por la que atravesaban las artes escénicas en el panorama cultural valenciano. "Hemos tenido muy mala suerte con los gestores culturales que hemos tenido", asegura el edil, si bien la vena política ha sido una constante en su familia.

    "Un día decidí implicarme y me levanté del sofá dispuesto a colaborar en política con Compromís". Para ello su militancia se basó en ayudar a los concejales electos que ya tenía la formación política en la ciudad tras las elecciones de 2011 – Joan Ribó, Consol Castillo y Pilar Soriano-. Desempeñó parte de su trabajo en la sectorial de fiestas, otra de sus aficiones, pues Galiana ha sido presidente de falla durante varios años. "El 50% del presupuesto para las fallas eran 'gastos diversos'", asegura Galiana en referencia al trabajo de transparencia que llevó a cabo el partido en esta sectorial.

    24 años seguidos de mandato le parecen demasiados para cualquier partido, algo con lo que consideraba fundamental acabar en Valencia para evitar el mal funcionamiento de las instituciones y "evitar la personalización de los partidos y la política".

    Preguntado por la valoración que hace sobre los dos años de tripartito y sobre si repetiría la fórmula de gobierno, Carlos Galiana afirma que "después de 24 años hubiéramos cometido un grave error si las tres fuerzas progresistas no nos hubiéramos entendido", y que "en Valencia funciona mejor que en otros sitios, puesto que los tres partidos estamos dentro del gobierno desde el primer momento". Si bien el concejal reconoce visiones diferentes entre los tres partidos –Compromís, PSPV y València En Comú-, afirma que "se ha roto para mucho tiempo el bipartidismo y la alternancia de los dos partidos más grandes" y asegura sentirse muy cómodo con sus socios. Asimismo, preguntado por los tres éxitos que, en su opinión, mejor definen al gobierno municipal, Galiana destacó la capitalidad mundial de la alimentación que ostenta Valencia, la reducción de la deuda y el desbloqueo de grandes proyectos como el Parque Central, las negociaciones de la Marina del Puerto, la línea 2 del Metro de Valencia o el Parking de Ciudad de Brujas.

    Por lo referente a la gestión económica, afirmó que "nos gastamos lo que tenemos, no nos endeudamos. Hemos reducido un porcentaje muy importante de deuda y estamos acumulando superávit y estamos desmontando el mantra y la teoría de que la derecha gestiona mejor la economía".

    Como objetivos a futuro el regidor se marca el seguir dando impulso a los mercados municipales y al sector agroalimentario local. En este sentido, Galiana aseguró a elperiodic.com que "el futuro de una ciudad está en su comercio, y muy especialmente en el comercio local", es por ello que una de sus intenciones es la de mejorar este aspecto y que pueda "seguir haciendo ciudad y barrios". Además, seguir trabajando para conseguir un acuerdo completo que aborde la cuestión de la libertad horaria y la apertura en domingos y en qué zonas. En este aspecto, el titular de comercio afirmó que "el PP lo hizo muy bien en este sentido si lo que querían era que no se pudiera cambiar nada de manera sencilla. Nosotros seguiremos peleando y trabajando para seguir protegiendo al pequeño comercio y la conciliación de la vida laboral y familiar".

    Dos zonas

    Galiana consideró posible llegar a un acuerdo, en el que todas las partes cedan, y que se puedan crear dos grandes zonas turísticas donde exista la conocida como 'libertad horaria', localizadas en el entorno de la Ciutat de les Arts i les Ciències y la zona del centro de la ciudad. "Creemos que el de diciembre de 2015 era un buen acuerdo en el que todas las partes podrían verse satisfechas", asimismo, recordó que Compromís va a presentar una Proposición No de Ley para que el poder de declarar zonas turísticas esté en manos de los ayuntamientos y no entidades administrativas superiores. "Queremos que se anule la Ley de Afluencia Turística", afirmó el concejal, algo que considera fundamental a la hora de sentarse a negociar entre los ayuntamientos y los grandes y pequeños comerciantes.

    Durante la entrevista, y a modo de conclusión, Carlos Galiana contó cómo ha cambiado su despacho, que actualmente muestra una divertida decoración, pagada con su dinero particular, y que muestra algunas pinturas a modo de reivindicación de los derechos y la necesidad de visibilidad de los artistas que muchas veces no encuentran espacios para exponer sus obras.

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