Compromís ya denunció en 2014 la adquisición de los terrenos de la Fórmula 1
La compra de los terrenos de la Fórmula 1 formaría parte de la investigación ahora en curso, según las informaciones aparecidas hoy en los medios de comunicación
La entrada de Compromís en la Corporación sacudió las viejas estructuras corruptas y supuso la denuncia de múltiples casos como el conocido hoy
Los terrenos aún están por desarrollar urbanísticamente debido a toda la problemática que arrastran
El alcalde de València y portavoz de Compromís, Joan Ribó, realizó dos denuncias a la Fiscalía Anticorrupción en octubre de 2014 en relación con el presunto caso de corrupción que hoy los medios de comunicación destapan. Con la honradez y la transparencia como bandera, la irrupción de Compromís en el panorama político valenciano ha supuesto una sacudida a las viejas estructuras de poder, como hoy en día todavía se demuestra.
Joan Ribó denunció, por una parte, la compra de los terrenos del PAI del Grao por 300 millones de euros, a cargo de la mercantil Acinelav Inversiones 2006, una empresa participada por el empresario y constructor detenido hoy, a través de su marca Construcción Valencia Constitución. Acinelav, hay que recordarlo, también estaba participada por Bancaja, socia de Valmor Sports, la encargada de llevar adelante las obras de la Fórmula 1. Asimismo, Joan Ribó denunció las obras del circuito de la Fórmula 1, con sus sobrecostes.
Según se ha sabido hoy a través de los medios de comunicación, entre las millonarias operaciones que están bajo investigación policial se encontraría la actuación urbanística desarrollada en el barrio del Grau, en la que se adquirieron los antiguos terrenos de depósitos de CLH por 300 millones de euros. Así, estas informaciones apuntan a la compraventa fraudulenta de los terrenos y la operación urbanística que comportaron.
Estaríamos, por tanto, ante la vinculación definitiva de la familia Barberà-Corbín con los negocios oscuros de la Corporación municipal a lo largo de la primera década de los 2000, que salpican presumiblemente a los dos grandes partidos que la conformaban, a través de mordeduras a los contratos públicos.
Finalmente, vuelve a demostrarse que fue con la entrada de Compromís al Ayuntamiento de València y con la ruptura del bipartidismo que comienza a desenmascararse la trama de corrupción que afectaba al Ayuntamiento de València. El objetivo, ahora, es que puedan ser recuperado el dinero que habrían sido sustraído, presuntamente, a todos los valencianos.