Cirugía de gran complejidad en Valencia: una joven con obesidad extrema sale del hospital con 110 kilos menos y una nueva vida
Para ello se empleó una novedosa técnica muy exigente para los cirujanos pero que permite perder más peso y eliminar incluso la diabetes
El cirujano Jose Vicente Ferrer y su equipo han realizado con éxito en el Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, una cirugía de alta complejidad, en una paciente con obesidad extrema, lo que supuso un reto excepcional para el equipo. Con un peso de 175 kg y una altura de 1,55 m, la paciente tenía un índice de masa corporal (IMC) de 75, teniendo en cuenta que los IMC habituales más altos, rara vez sobrepasan la cifra de 55, es decir, que tenía una obesidad grado 3 u obesidad mórbida.
La paciente, cuya calidad de vida ha mejorado extraordinariamente, ha perdido en la actualidad 110 kg y sin ningún problema de salud como consecuencia de la cirugía, gracias a la técnica bypass tipo SADIS cuya principal ventaja es que mantiene la función digestiva normal.
Tal como explica el doctor Ferrer, “este tipo de operaciones y en pacientes tan complejos, son poco frecuentes, suponen un gran reto técnico para los cirujanos, y solo la deben realizar equipos con mucha experiencia”. “Pero también -añade el especialista- es un reto para todo el equipo que acompaña al paciente durante la su preparación, con dietas especiales, ejercicio físico, soporte psicológico, que duran hasta 3 meses, ya que de otra manera, los pacientes pueden abandonar el proceso. “El estómago se hace más pequeño mediante una operación de manga gástrica y como se mantiene la válvula de entrada y de salida del estómago, tiene una función digestiva normal”, subraya el especialista.
“Además, se le hace derivación de más de la mitad del intestino, de forma que la comida ya digerida, solo recorre 3 metros de intestino (en lugar de los 6 a 8 metros habituales), pero donde se absorben los nutrientes suficientes para una vida sana. La operación tiene mayor fuerza y es capaz de curar los problemas metabólicos como la diabetes, a la vez que se pierde el peso. Si el paciente come sano, nunca tendrá problemas nutricionales”, explica el Dr. Ferrer.
Complejidad del caso
Según el cirujano, “hay que tener en cuenta la complejidad del caso, no solo por el peso sino también por las patologías asociadas como hipertensión, colesterol alto, diabetes incipiente, grandes dificultades de movilidad y para dormir y colesterol alto”.
En una primera consulta, un equipo médico multidisciplinar le planteó al paciente una preparación preoperatoria de tres meses. Durante ese periodo, el paciente recibió una dieta hiperproteica e hipocalórica, asistencia psicológica, programas de ejercicio físico y tratamiento farmacológico de última generación. Se utilizaron un nuevo análogo de la GLP1, que ayuda al paciente a mejorar la diabetes y a perder peso, reduciendo el riesgo operatorio. “Tras las visitas semanales y posteriormente quincenales, durante tres meses, la paciente tuvo una excelente respuesta a la terapia y conseguimos que perdiese 36 kilos antes de la operación”, subraya el doctor Ferrer.
Preparación preoperatoria e intervención
Incluye un protocolo de prevención de posibles complicaciones respiratorias y de trombosis que son el tipo de problemas más habituales. Según el especialista, “la preparación en la mesa de quirófano es de vital importancia. Tuvimos que colocar a la paciente con sistemas de sujeción especiales que no le dañasen e intubarla mediante sistemas avanzados que permiten ver con una cámara todo el proceso de la intubación, que puede ser muy compleja en estos pacientes”.
La operación era compleja anatómicamente y con una gran exigencia técnica. “A las a las dos horas de la intervención se levanta, a las tres horas toma líquido y comienza a realizar ejercicios respiratorios para evitar trombosis. Gracias a cómo se preparó a la paciente durante semanas, a la metodología durante la operación y la anestesia del paciente, a las 48 horas ya se fue a su casa con dieta líquida y paseos diarios de una hora", comenta el doctor Ferrer quien recalca que “es necesario un buen seguimiento post operatorio, análisis sangre multidisciplinar, control médico y psicológico para cambios hábitos, ejercicio físico, nutrición”.