El Ayuntamiento de Valencia consolida el período medio de pago y 2019 con indicador negativo

El concejal de Hacienda, Ramón Vilar, ha informado de que  se ha consolidado el período medio de pago a proveedores de servicios al Ayuntamiento de València, que en el mes de diciembre de 2019 se situó en 25’27 días, un tiempo que el concejal ha calificado de  “absolutamente razonable”, a la vez que ha destacado la reducción de intereses de demora.   Descontando el periodo de verificación y comprobación de facturas de 30 días, el Ayuntamiento de València “se ha vuelto a situar en -4 días en el Ayuntamiento y -5 en el global  que incluye organismos autónomos, fundaciones municipales”.                                                                                                                                 

Vilar ha hecho públicos hoy los datos del periodo medio de pago global correspondiente al mes de diciembre de 2019, que se sitúa en 25’27 días. Según el concejal, descontando el periodo de verificación y comprobación de facturas de 30 días, el Ayuntamiento de València “se ha vuelto a situar en -4 días en el Ayuntamiento y -5 en el global  que incluye organismos autónomos, fundaciones municipales y otras entidades como el Consell Agrari Municipal”. “Por tanto el Ayuntamiento cierra 2019 pagando a proveedores en ‘negativo’, ha resaltado”.

“Se consolida así un periodo medio de pago a contratistas y proveedores absolutamente razonable y del que estamos muy satisfechos, ya que  ha sido y sigue siendo una de las preocupaciones fundamentales del Govern del Rialto que aquellos que prestan sus servicios al Ayuntamiento cobren en tiempo y no les suponga ningún tipo de perjuicio por morosidad”, ha firmado Vilar.

A este respecto, el concejal de Hacienda ha recordado que “la reducción del plazo de pago a proveedores supone el ahorro de intereses de demora, una mala práctica que caracterizó la gestión del equipo de Gobierno del Partido Popular que llegó a desbocar la deuda municipal”.

Asimismo, Ramón Vilar ha hecho hincapié en que con el cumplimiento de los pagos el Ayuntamiento “impulsa el desarrollo económico de la ciudad por medio del apoyo a las empresas, los autónomos y la creación de empleo. Además, consolida a València al frente de las ciudades españolas «en cuanto a este indicador económico que refleja la eficiencia en la gestión de los recursos públicos”.