El artista Ernesto Casero gana la beca de la Casa Velázquez 2016-2017
El Ayuntamiento de Valencia ha concedido la beca de la Casa Velázquez al artista Ernesto Casero. Esta subvención permite desarrollar un proyecto artístico en la Casa Velázquez de Madrid durante un curso académico, lo que permite a la persona beneficiaria realizar un verdadero trabajo de investigación y reflexión sobre la creación contemporánea. La dotación es de 16.000 euros, lo que convierte esta beca en una de las mejor dotadas del panorama artístico actual.
La beca de la Casa Velázquez es consecuencia de un convenio firmado el año 1927 entre el Ayuntamiento de Valencia y esa institución cultural, que forma parte de la red de escuelas e instituciones de investigación del Estado francés en el extranjero. El gobierno municipal pretende mantener y potenciar esta ayuda que conlleva, en última instancia, la incorporación de una obra al patrimonio municipal. “La beca Velázquez es muy importante para el Área de Cultura del Ayuntamiento de Valencia. Es una de las mejor dotadas y resulta muy enriquecedora para el artista o la artista que la gana, ya que le permite hacer un trabajo notable. Por ello, nuestra intención es darle apoyo y continuidad, al tiempo que mejoramos aquellos aspectos que consideramos necesarios, como involucrar a los colectivos profesionales de la ciudad”, ha explicado la concejala del Área de Cultura, Glòria Tello.
De hecho, por primera vez en muchos años los colectivos profesionales de las artes plásticas de la ciudad de València han podido tener voz en el proceso de conformación del tribunal evaluador de los proyectos. Así, se ha acabado con la tradición de los últimos años de que fuera el concejal o la concejala de Cultura quien escogiera directamente a dos de los miembros del jurado, que este año han sido propuestos por la Asociación de Artistas Visuales de Valencia, Alicante y Castellón (AVVAC) y por la Asociación Valenciana de Críticos de Arte (AVCA). Por otra parte, también destaca este año como novedad el hecho de que, por primera vez, las personas candidatas han podido conocer previamente al jurado y han estado informadas puntualmente del proceso de selección.
“No solo damos voz al tejido profesional, sino que además queremos garantizar la neutralidad y la transparencia de la acción municipal. Tenemos que apoyar a la cultura sin condicionarla”, ha asegurado Tello.
El jurado ha estado integrado por: Xavier Bodouin, director artístico de la Casa de Velázquez; Enrique González Flores, miembro de la Casa de Velázquez; Nelo Vinuesa, ganador de la beca 2015-2016; María Teresa Ibáñez, gestora cultural de la Universitat de València, a propuesta de la AVCA, e Isidro López-Aparicio Pérez, crítico y comisario, a propuesta de la AVVAC.
Por otro lado, el Ayuntamiento también ha iniciado un proceso de consultas con los colectivos profesionales para poder elaborar unas bases que se adapten a las necesidades de los jóvenes artistas valencianos, dado que las existentes no se han modificado desde hace años. Entre los problemas que hay que resolver está, por ejemplo, el hecho de que la dotación económica hasta ahora se hacía efectiva al acabar la estancia de la persona becada, una paradoja al tratarse de una beca de estudios.
EL GANADOR, ERNESTO CASERO
El ganador de la beca Velázquez este año es Ernesto Casero (1977), licenciado en Bellas Artes por la Universidad Politécnica de València. Su trabajo ha evolucionado desde cuestiones relacionadas con la percepción visual y la representación bidimensional hasta la producción en los últimos años centrada en las ideas de verosimilitud y verdad, la historia de la biología y la representación de la naturaleza desde el arte y la ciencia.
Casero ganó en 2005 el premio Senyera de pintura, concedido por el Ayuntamiento de Valencia, y el premio de pintura de la Academia de Bellas Artes de San Carlos.
El jurado ha valorado tanto su trayectoria como el rigor en el planteamiento de su proyecto, que ha de realizar a partir de un trabajo de investigación coherente y sostenido en el tiempo, que encaja a la perfección con el objetivo de una beca de estancia de estudios como la Velázquez.
El proyecto de Casero pretende desarrollar la serie A darwinian point of view (Un punto de vista darwiniano), que constituye un comentario a la visión de la evolución de Darwin. En sus dibujos se representa un animal extinto por la acción humana y sobre él aparece una palabra dibujada, un adjetivo que alude a la idea spenceriana de la supervivencia del más apto.