Valencia quiere compostar su basura orgánica
La concejal de medio ambiente, Pilar Soriano, explicó la medida a asociaciones vecinales y entidades
El programa se aplicará en San Marcelino y Benimaclet, y en algunos puntos de Poblats Martítims y Quatre Carreres
La mejora de las condiciones de vida generales y el aumento del consumo a partir de la segunda mitad del pasado siglo comportaron un aumento del consumo de materias primas, lo que conllevó, inevitablemente, un aumento de los residuos que las familias, comercios e industrias generan. A día de hoy, la gestión de residuos constituye una de las principales ocupaciones de los ayuntamientos de medio mundo. Valencia no es una excepción, y es por ello que desde la pasada semana, en algunos barrios de Valencia, ya se recoge la materia orgánica, esto es, los restos de comida sin envases.
Los contenedores azules para el papel y el cartón, los amarillos para envases, bricks y latas o el verde para el vidrio, se han camuflado poco a poco en nuestro entorno urbano. Estos contenedores forman ya parte de nuestro paisaje cotidiano. No obstante, cada vez son más los ayuntamientos que apuestan por una recogida selectiva de otros residuos, como bien pueden ser las pilas y baterías, el aceite doméstico usado o la ropa vieja.
Para dar respuesta al problema de los residuos sólidos urbanos, la ciudad de Valencia cuenta con un servicio propio de ecoparques móviles. Por ello, varios camiones convertidos en pequeños ecoparques, recorren de lunes a sábado los barrios y distritos de toda la ciudad para ofrecer una respuesta global y uniforme a la recogida de residuos que no debemos tirar a los contenedores de las calles. Es el caso de las pilas, las placas, pequeños aparatos electrónicos o la cerámica, entre otros muchos.
EL PROGRAMA PILOTO DEL GOBIERNO DE RIBÓ
A pesar de la variada oferta existente, el Ayuntamiento de Valencia, dirigido por Compromís y su Alcalde, Joan Ribó, ha querido dar un paso más allá con la instalación del conocido como cuarto contenedor. La Comunitat Valenciana, a diferencia de regiones como País Vasco o Cataluña, donde el sistema está muy extendido, apenas cuenta con experiencias de recogida de materia orgánica, puesto que es actualmente cuando se empiezan a poner en marcha experiencias en este sentido en ciudades como Valencia, Alicante y también en Mislata, Vila-Real o Almassora.
Los barrios elegidos para esta primera experiencia, dirigida por la Concejalía de Medio Ambiente de la también miembro de Compromís Pilar Soriano, son San Marcelino y Benimaclet, además de los centros escolares, mercados y centros de salud de los distritos de Quatre Carreres y Poblats Marítims. Un total de 250 contenedores de color marrón con los que el Ayuntamiento quiere empezar a implantar la separación de este importante residuo, para contribuir con ello a la reducción de la cantidad de residuos que llegan a los vertederos e incineradoras y cumplir de esta manera con la normativa europea vigente en la actualidad.
FABRICACIÓN DE ABONO AGRÍCOLA
Para ello, la concejala del área, ayudada de los técnicos, ha llevado a cabo una turné por barrios y centros de las zonas elegidas, para explicar y dar a conocer el proyecto pionero. Según informó el propio consistorio, la materia recogida se destinará al compostaje, a través de la Entidad Metropolitana de Residuos, que ya tiene preparada una línea específica de tratamiento de los mismos. Además, se estudia de la mano de la Universitat Politècnica de València y del Instituto de Investigaciones Agrarias las posibles salidas al mercado de esta materia orgánica recogida y compostada, la cual, por el momento se destinará a la fabricación de abono agrícola.