Jonatan, embajador de Castellón
El alcalde de Castellón ha mandado cartas a castellonenses que viven diferentes lugares del mundo invitándoles a que contribuyan a difundir el amor a su tierra. La respuesta de uno de ellos, me ha parecido tan genial que creo que merece la pena difundirla. Dice así:
"Excelentísimo Señor Alcalde, Reconozco que he recibido con sorpresa su petición de convertirme en embajador de Castellón aprovechando que me encuentro exiliado en un país europeo; pero tras el sobresalto, ha venido el orgullo de quien nació en Castellón y, a pesar de la distancia, reconoce la Plana como su hogar. Convertirme en embajador de la ciudad es todo un honor para el que no se si estoy preparado, aunque tengo experiencia en defender mi ciudad: durante años he tenido que poner mi mejor sonrisa cuando me preguntaban si me iba a Castellón en tren o avión y debía aceptar de buen grado las bromas que hemos sufrido los castellonenses sobre el aeropuerto y su estatua. Nuestro aeropuerto, perdón, el aeropuerto del abuelo ha sido todo un máster en diplomacia para cualquier castellonense que viviera fuera.
Aun así, se me hace extraño convertirme en embajador para representar a mi ciudad a la vez que me quitan mi tarjeta sanitaria a los 90 días de marcharme. Será cosa mía, que soy muy agorero, pero ¿qué me pasará si en medio de mi nueva función representativa me tuerzo un tobillo mientras la seguridad social española se desentiende de mi a los 3 meses de vivir fuera por más que haya cotizado? ¿Tiene el ayuntamiento una salida preparada para estos percances? Estoy seguro de que están trabajando en ello y de que sí la tienen.
Otras dudas se me acumulan a la hora de ejercer el cargo honorífico de embajador de Castellón: ¿En qué momento debo hablar a mis vecinos europeos de que si el frío aprieta, los alumnos de algunos colegios han de llevarse mantas porque la escuela no puede pagar la calefacción? ¿O que otros alumnos, profesores y padres se encierran en los colegios para evitar el cierre de aulas para la enseñanza en valenciano?
Creo que el tema de la educación, mejor no lo comentaré mucho en mi nuevo cargo diplomático. Si sacan el tema, desviaré la conversación hacia la sanidad... aunque viendo que miles de extranjeros que viven en nuestra ciudad están de facto sin cobertura sanitaria y saturando las urgencias porque se les ha retirado la tarjeta médica, no se... igual de sanidad tampoco es necesario comentar mucho.
La transparencia democrática no creo que sea nuestro punto fuerte: que nuestro presidente no fuera escogido en elecciones, ni usted (nuestro alcalde) tampoco, no nos deja en buen lugar. ¡A ver como explico que todo se debió a un corrimiento de sillones tras la dimisión de Camps! Quizás podría poner a los 10 imputados de las cortes en el caso Gürtel como mártires de la democracia, pero debería hacer verdaderos malabarismos dialécticos para defender los más de 100 imputados que hay en el PPCV (búsquese en la lista, a ver si sale su nombre). Espero sus comentarios al respecto para saber cómo actuar, seguro que tienen un argumentario preparado.
¿Sobre las 63.502 personas que dice el SEPE que están en el paro hablo o no hablo?
Estoy seguro que a usted le pasa como a mí y duerme con el miedo de perder el trabajo, o de no llegar a fin de mes, o de tener que pedir un crédito para que su hijo vaya a la UJI. Y sé que vive con esos miedos porque el hecho de pedirme que me convierta en embajador de Castellón es un gesto de inmensa sensibilidad y empatía hacia las personas que hemos tenido que emigrar.
Desde el exilio económico en el que vivo, quiero que sepa que ya represento a la ciudad que me vio nacer y que vota sistemáticamente a un partido con decenas de casos de corrupción en sus filas, que ataca por ideología la sanidad, educación y a cualquier otro servicio público, que nos embarca en cualquier empresa extravagante si en ella hay cemento o Calatrava de por medio… Desde la inmigración ya contribuyo a mejorar la imagen de Castellón: distanciándome del ayuntamiento, criticando la corrupción, ridiculizando a nuestros políticos y demostrando que en esta ciudad no somos todos iguales. Y lo hago, como usted me pide en su documento de adhesión, de forma desinteresada y sin contraprestación alguna al respecto. PD. Además lo hago todo el año, no solo antes de las elecciones." Jonatan Alañón López.
Seguimos repartiéndonos las pérdidas
No hay día en el que el Estado no le entren, desde todos los rincones del país, nuevos embolados. Ahora le acaba de tocar el turno a la inmobiliaria de Marina D´Or que acaba de enviar al saco público un montante de 99 millones de euros para que nos los repartamos entre todos a través del banco malo y la extinguida Caja de Ahorros del Mediterráneo.
El padre de la empresa, Jesús Ger, muy bien apoyado por quienes podían apoyarle, montó un imperio. Cuando el negocio le fue bien, le fue bien a él. Ahora que el negocio ya no funciona, el gran emprendedor, que ya sabía hace tiempo lo de las suspensiones de pagos, nos da participaciones.
Los beneficios que se generan en este país son para los hombres de negocios. Las pérdidas para todos.
No puedo estar más de acuerdo con Vd., en su apreciación sobre esta carta/contestación. A pesar de su fina ironía, la de la carta, da ganas de llorar por lo acertado de sus comentarios. Algunas veces ya he comentado lo difícil que es explicar, lo que pasa en España y en la Comunidad Valenciana, aquí en centroeuropa, donde la gente dimite por que copió en la “catequesis de la 1ª comunión”. No entiendo, como hay quien justifica, casi todo, con comentarios intrascendentes y rebuscados.